El equipo juvenil del FC Barcelona también domina en su categoría, como la primera plantilla azulgrana, y se impuso por 2-0 al Real Celta en la final de la XV Copa de Campeones de la División de Honor, en un partido que se disputó en Almuñécar (Granada).

Los catalanes consiguieron imponerse a un Celta de Vigo que gozó de buenas ocasiones para haberse adelantado en el marcador pero unas veces el desacierto atacante y otras el portero Marc Martínez lo impidió. E incluso se le anuló un gol en el minuto 51 en un remata de Cabeza de Pedro García con el 0-0 en el marcador.

Los dos goles llegaron en la segunda parte, el primero en el minuto 52 tras un penalti que le hicieron a José Luis al ser derribado dentro del área.

Pena máxima que transformó Jonathan con un lanzamiento pegado al palo derecho de la puerta de Mario, quien no pudo hacer nada para pararlo.

El segundo llegó en el minuto 68 y fue en una gran jugada de Rochina, quien dio un pase a Carmona para que éste solo dentro del área bata al portero gallego de tiro fuerte y cruzado.

Incluso el Barcelona pudo hacer el tercero en un penalti que de nuevo le hicieron a José Luis pero en esta ocasión Mario detuvo el lanzamiento de Jonathan.

La Copa de Campeones de División de Honor Juvenil se ha disputado en el estadio municipal Francisco Bonet, en la localidad granadina de Almuñécar, con la presencia de los campeones de los siete grupos que conforman esta categoría nacional.