Tanques contra chanclas

El Mallorca acudirá a Sevilla con chanclas y bermudas. El verano ha irrumpido en la isla y, con el trabajo finiquitado con profesionalidad, el partido aparece sin responsabilidad, ansiedad ni necesidad. Los jugadores sacan las maletas del altillo, se apoderan de las agencias de viaje y sólo esperan las notas finales de los niños para salir pitando. El trabajo quedó hecho gracias a una extraordinaria segunda parte del campeonato: es el equipo que más ha mejorado de una vuelta a otra. El encuentro aparece como la oportunidad de dar un paseo agradable en un maravilloso estadio y fomentar la idea de quedar entre los diez primeros, circunstancia que podría proporcionarle a los futbolistas un regalito extra.

Mientras, el Sevilla vela sus armas para dar el golpe definitivo. La victoria en Villarreal cortó la sangría de malos resultados y, sobre todo, hizo posible que Kanouté y Luis Fabiano volviesen a jugar juntos. Jiménez decidió en su día separarlos y los dos pedían a gritos el reencuentro. Los dos marcaron y acabaron con una sonrisa en el rostro. Con el crédito recuperado, volverán a salir de inicio, salvo sorpresa. El equipo se ha reforzado y conjurado para eliminar desde el inicio los fantasmas que aparecen en cada actuación en el Sánchez Pizjuán, convencer a la afición y atar el perseguido tercer puesto.

Con Konko y Fernando Navarro sancionados, Adriano volverá al lateral derecho y Drago jugará en el izquierdo. El serbio podría disputar su último partido en Nervión. Tras un año oculto en la suplencia, todo indica que en verano buscará nuevos horizontes más estimulantes para él. Navas también recuperará la titularidad. Sólo hay una duda: jugar con el trivote (Duscher-Renato-Romaric) o apostar por Capel o Perotti y eliminar a uno de los centrocampistas. Manzano, relacionado esta semana con el futuro sevillista, recupera a Moyá. El resto será la base del grupo que lleva actuando regularmente en los últimos dos meses. Jurado y Aduriz seguirán con la competencia sana de señalarse como máximo goleador del equipo.

Los tanques se preparan para luchar contra las chanclas y la relajación del Mallorca. Aunque no les he hablado de los maletines que aparecen cada año. Será por la crisis...

Jiménez, Manzano y la respuesta de la afición

Jiménez vuelve a ser protagonista. Durante la semana, las especulaciones sobre su futuro se dispararon. Y Manzano entró a formar parte de esta novela. Tomó fuerza la idea de que el actual entrenador del Mallorca se convirtiera en técnico del Sevilla. Manzano, que estuvo en la capital andaluza, se dejó querer. En la isla se habla de que una cláusula de 500.000 euros lo liberaría y que en verano hará las maletas. En el recuerdo, el grito de guerra tras la derrota ante el Real Madrid: "¡Jiménez, vete ya!". Los sevillistas animarán, aunque Nervión se ha convertido en un foro donde decidir el futuro del actual entrenador.