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Liga BBVA | Málaga

El equipo entona el mea culpa y promete guerra

La plantilla no durmió bien la noche del sábado. Uno de los peores partidos de la temporada emergió en el momento menos oportuno, justo en la recta final hacia Europa. Sin embargo, el Málaga no se rinde. Queda tiempo, vida y esperanza, y por eso los jugadores prometen revancha.

S. Brovtsyn
<b>SE VOLVERÁ A VER. </b>El Málaga celebra con rabia un gol a Osasuna en el Reyno.

Málaga se despertó ayer con una de las resacas más desagradables de la temporada. La derrota en Soria ante el Numancia por 2-0 ha inundado el vestuario blanquiazul de la sensación de que se ha perdido una oportunidad inmejorable para acercarse hacia puestos europeos, pero también de ganas de resarcirse de inmediato. Por eso, la plantilla entona el mea culpa, pero promete guerra de aquí hasta el final del campeonato. El objetivo de la UEFA sigue muy vivo todavía y el mensaje de los jugadores de Antonio Tapia es el que compara la vida con la esperanza. "Europa es posible", se apresuraban a recordar los malaguistas al término de los 90 minutos en Los Pajaritos. Con ese mismo convencimiento va a preparar el próximo choque en casa ante el Racing. "Jugamos un partido para olvidar en el que no nos salió nada, pero ya no se puede hacer nada y lo que hay que hacer a partir de ahora es descansar y recuperar los puntos ante el Racing que viene a nuestra casa. Sabemos que todavía quedan muchas jornadas, estamos en la pelea y aún muy vivos", explicó el siempre cumplidor Weligton. Sus palabras son el eco de todo el Málaga, convencido de que, ahora sin excusas, hay que aspirar al pleno de puntos para lograr la hazaña. "Ya no nos vale nada más que la victoria ante el Racing y dar nuestro cien por cien en lo que queda de Liga", afirmaba Albert Luque. El equipo ve demasiado cerca la orilla y se siente con fuerzas para lanzar cuatro brazadas más.

Además, Tapia ha tomado buena nota de lo que le espera a sus hombres en las últimas jornadas. El Málaga tendrá que hacer de uno de los jueces para el descenso y es que, tras recibir a los cántabros dirigidos por Juan Ramón Muñiz, se las verá con el Sporting, el Betis y el Espanyol. Ante el Numancia, el técnico baenés reconoció que no supo motivar con habilidad a los futbolistas y la mala experiencia no va a caer en saco roto. El aspecto psicológico será fundamental, pero los jugadores blanquiazules ya han hecho su declaración de intenciones. Van a pelear hasta el final.