El Almería disfruta de la permanencia en Santander

Se esperaba un duelo de delanteros entre Zigic y Negredo, pero al final ni uno ni otro respondieron a las espectativas y acabó siendo Ortiz el protagonista del partido, en dos desafortunadas acciones de la defensa local. Al final, el Almería que llegó a Santander con la vitola de ser, con el Numancia, el peor equipo a domicilio, sumaba lejos del estadio de Los Juegos del Mediterráneo los tres puntos que necesitaba para alcanzar la barrera de 43.

Antes del comenzar el partido el público del Sardinero brindó una gran ovación al golfista Severiano Ballesteros, quien eligió los Campos de Sport de El Sardinero para su primera aparición pública tras ser sometido a varias intervenciones debido a un tumor cerebral. La vuelta de Toni Moral a la banda izquierda, en lugar de Óscar Serrano, fue el único cambio que introdujo el técnico Juan Ramón López Muñiz sin estar obligado por las numerosas bajas por lesión o sanción que aquejaban en esta jornada al Racing, para recibir a un Almería en cuyo once inicial no hubo sorpresas.

El Almería, se adelantó muy pronto en una jugada afortunada, que comenzó con un despeje de Sepsi, que después de golpear en Uche, fue rematado de volea a las mallas por Juanma Ortiz. Y, apenas tres minutos más tarde, Uche sirvió otro balón a Nieto, para que éste rematara libre de marca poniendo en apuros a Coltorti.

La defensa cántabra ofreció su peor cara en el arranque del partido y el Almería se benefició de ello, con una nueva llegada de Juanma Ortiz, que ante la pasividad de los centrales tuvo tiempo para revolverse dentro del área y marcar su segundo gol con un disparo flojo que entró ajustado a la base del poste.

El Racing intentaba dar la réplica, con mucho protagonismo de Munitis, pero entre que el delantero cántabro no tenía su tarde y que sus compañeros no le ayudaban demasiado, el Almería se defendía sin problemas, aunque Zigic pudo acortar distancias con un buen remate de cabeza que repelió el larguero.

Pésima primera parte de un Racing que naufragaba el defensa, no se enteraba en el centro del campo por la nula aportación del tándem Colsa-Lacen y que en ataque tenía a Tchité y Zigic sin recibir balones. Por su parte, el Almería se movía a placer por el campo combinando al primera toque y haciéndose con la mayor parte de los balones divididos.

Para tratar de corregir la situación Muñiz dio entrada tras el descanso a Edu Bedia y Serrano, para sustituir a Colsa y Sepsi, respectivamente. Los cambios dieron otro aire al Racing, que tuvo más presencia en ataque, pero sin crear peligro.

El Almería dio un paso atrás para defender su ventaja y el Racing necesitó casi veinte minutos para disponer de una ocasión clara en un pase de Serrano, que remató de cabeza Zigic en el segundo palo, ligeramente desviado. El pobre juego del Racing hizo que un sector del público gritara "¡Muñiz vete ya!" y que aparecieran mucho pañuelos blancos en la grada ante la nula capacidad de respuesta de los locales.