Liga Adelante | Celta
"En el primer cuarto de hora hicimos el ridículo"
Después de la tragedia de Vallecas, era el turno para que algún peso pesado de la plantilla diese la cara y explicase lo sucedido. Como casi siempre, fue el turno para Rubén. El santiagués no se escondió, hizo autocrítica y reconoció que ninguno estuvo a la altura de las circunstancias.
La goleada sufrida en Vallecas ha hecho mucho daño en el seno de la plantilla viguesa. Uno de los capitanes celestes salió a la palestra para reconocer la evidencia: "En los quince primeros minutos hicimos el ridículo. Luego se vio un partido diferente, pero quizá también motivado por el resultado y la relajación por parte de ellos".
El santiagués fue contundente en la autocrítica: "Yo nunca he sido de justificaciones ni de buscar pajas en el ojo ajeno. Por mucho que piense y que busque un botón para solucionar todo esto, no lo encuentro. Lo único que se me pasa por la cabeza es que no valemos para jugar ese tipo de partidos, que se acercan más al nivel de Primera que de Segunda".
No obstante, el central también buscó el lado positivo: "El partido ante el Rayo puede ser más beneficioso que perjudicial. Nos puede ayudar a abrir los ojos y ver las carencias que realmente tenemos. Yo soy el primero de la lista y todos tenemos que analizar nuestros errores".
Fallos defensivos.
El Celta se vio completamente desbordado por el ataque del Rayo, pero Rubén no cree que la zaga sea la única culpable: "Somos un bloque y si empezamos a defender mal desde el delantero, el balón llegará más fácil hasta el portero. Es una situación que hay que corregir entre todo el grupo y no es cuestión de culpar a uno o a otro. Si los de arriba presionasen la salida del balón, igual sólo nos llegaban dos veces en vez de cinco".
El ex madridista no quiso alegar falta de compromiso de sus compañeros a la hora de defender: "Las cosas no salen bien, pero comprometidos estamos todos. Existe como una especie de miedo escénico que no nos deja actuar como sabemos. Andamos un poco perdidos, sin saber qué hacer. Es posible que todavía no sepamos muy bien las directrices que el entrenador nos está marcando".
Rubén vio la décimoquinta tarjeta amarilla de la temporada el pasado sábado y, por lo tanto, no podrá jugar ante el Levante. El zaguero analizó tanta amonestación: "Juego en una posición delicada y yo tampoco he sido nunca una monja. Utilizo más mi físico que cualquier otra cualidad. También es verdad que este año he protestado un poco más de lo habitual en mí".
El gallego ha batido su récord personal: "No recuerdo, pero creo que nunca me habían sacado tantas tarjetas en una misma temporada. Entre cinco y siete tarjetas han sido por hablar. Si me tuviera la boquita cerrada, estaríamos hablando de ocho cartulinas que sería una marca normal a estas alturas de la temporada".