El Barcelona se juega su gran campaña en 44 días

Sigue creyendo el barcelonismo en poder conquistar un triplete que sería catalogado como histórico. A un partido de alzar de nuevo la Copa del Rey, semifinalista de Champions League y con seis puntos de ventaja en el campeonato doméstico sobre el Real Madrid (restan ocho partidos) los culés han elaborado una magnífica campaña, aunque ahora toca lo más complicado: abotonarlo para que nada de lo conseguido se escape.

Después de desplegar un fútbol maravilloso, de apenas sumar tropiezos (sin dar pie a hablar de crisis), de coleccionar elogios procedentes de todos los rincones y de ser la envidia de muchísimos equipos, a Pep Guardiola y su equipo se les presenta un horizonte complicado, con una serie de picos (convertidos en equipos potentes) que podrían ponerle un pero a su eficaz camino al éxito. La aventura comenzará mañana en el Alfonso Pérez Muñoz ante un equipo que no se le ha dado bien a los culés en los últimos tiempos y del que su presidente es socio del Real Madrid: el Getafe. Con el recuerdo de la última edición de la Copa del Rey presente, los culés temen que un pinchazo, unido a otra victoria del Madrid acabe comprimiendo aún más la tabla por arriba, algo que sería nefasto por eso de conducir y asimilar la presión.

Cansancio. Una de las razones que más azotan al equipo culé es el cansancio. Lleva un porrón de partidos consecutivos, con un nivel de exigencia altísimo y en el que todos los componentes del equipo, cuando tienen una opción, tratan de dar el máximo, sabedores de que hay un equipo A y otro B, digan lo que digan. A Leo Messi se le está viendo algo fatigado desde que estuvo con su selección en Argentina y Bolivia, pese a la exhibición que ofreció en el Camp Nou ante el Bayern; Xavi Hernández y Andrés Iniesta deben calcular sus movimientos, como Dani Alves. El Barça tiene la gloria muy cerca; le quedan sólo 44 días.

Cuatro partidos en el Camp Nou

Si el equipo supera al Chelsea en las semifinales de la Champions League, al equipo de Guardiola le quedará una docena de partidos por delante, de los que sólo cuatro serán ante su público. Sevilla, Chelsea, Villarreal y Osasuna pondrán a prueba a los culés ante sus hinchas, que esperan ansiosos a que todo acabe como esperan: ganándolo todo.