Robinho, un problema para Mark Hughes

En el Manchester City, que perdió su último partido liguero en casa ante el Fulham por 1 a 3, parecen haber saltado todas las alarmas. Robinho, titular indiscutible desde el comienzo de temporada, comenzó el encuentro ante el Fulham en el banquillo a pesar de salir al campo en el minuto 63. La grada reprochó a Mark Hughes, técnico del City, su suplencia, algo que rápidamente se justificó: "Estoy tratando de proteger a los jugadores", dijo Hughes tras la derrota. "Robinho ha tenido una gran primera vuelta, pero ha sido uno de los que han tenido más carga de trabajo. Es mi primera oportunidad de darle un descanso".

Desde su llegada al City, fue traspasado del Real Madrid por 35 millones de euros, el jugador brasileño ha participado en 19 encuentros marcando 12 goles pero, curiosamente, desde que ha empezado 2009 Robinho no ha conseguido marcar aún. Con el partido ante el Fulham en 1-1, los aficionados del Manchester City criticaron duramente a Hughes gritándole, constantemente, "usted no sabe lo que está haciendo" cuando decidió cambiar a Evans por Bojinov y dejar al internacional brasileño en el banco.

En referencia a la pérdida de varios jugadores importantes de cara al partido de Cuartos de final de la Copa de la UEFA frente al Hamburgo, Hughes justificó aún más la ausencia del brasileño. "Yo sé en que estado físico se encuentran los jugadores. Aún así, la gente hace comentarios que quizá estén fuera de lugar", añadió Hughes.

Por el momento, la polémica en casa del City está servida y no sólo en lo meramente deportivo en cuanto a resultados se refiere, sino que el 'caso Robinho' puede desembocar en algo más grave si el entrenador no hace lo apropiado para solucionar el problema, tanto con el jugador como con sus aficionados.