¿Qué le ha ocurrido al equipo para perder de esta forma los dos últimos partidos?

Una clave para mí es tener disciplina. No hay más, porque la plantilla es fuerte y tenemos mucha calidad para estar siempre arriba, pero en los dos últimos partidos para mí la clave fue eso: nos faltó disciplina.

¿Cómo se ha tomado el vestuario la derrota?

Es un día difícil, duermes mal, piensas mucho en el partido, analizas por qué estuvimos mal y por qué te dejas los puntos importantes en estos partidos. Es complicado dar una visión positiva en este momento, pero esperemos que después de este bache negativo salgamos más fuertes para el próximo partido.

¿Cree que se está escapando el último tren para clasificarse para la Champions?

Son puntos clave que dejamos ir. No tuvimos reacción, pero lo más importante es que seguimos vivos, el objetivo no está muy lejos y no es imposible.

Por el encuentro de ayer parece que el equipo no busca lograr la cuarta plaza...

Nosotros pensamos otra cosa, pero cuando ves el partido, sí es normal que la gente piense eso. Todos tenemos el mismo objetivo y estamos más fastidiados por lo que la gente pueda pensar.

¿Qué le parecieron las críticas que lanzó el público del Vicente Calderón?

Es más o menos lógico. Después, hay con dos o tres jugadores que son injustos, porque ellos no tuvieron tiempo para demostrar nada. Las críticas desde el principio son un poco difíciles, pero hay que olvidarlo. Puede ser que con algún futbolista haya veces que sean injustos, porque casi no le da tiempo a tocar la pelota. Pero tenemos que olvidar eso. Para jugar a un nivel profesional y ser un gran futbolista tienes que afrontar este asunto. Y ahí es donde se notan los grandes jugadores. El que quiere estar en un campo delante de 60.000 personas cada fin de semana tiene que asumir que puede pasar esto.

En cuanto a lo personal, ¿cómo se encuentra en la banda derecha?

Me gustaría aprovechar un poquito más de tiempo como delantero. Cada vez que juego delante he tenido la suerte de marcar goles y siempre lo he hecho más o menos bien, sobre todo a principio de temporada. Después no me ha tocado jugar ahí muchas más veces, pero hay un hombre para decidir eso y respetamos todas las decisiones. El problema es que cuando uno no juega mucho y al final te toca salir por la banda, no tienes ritmo y es algo complicado. Pero no estoy aquí para buscar excusas. Los 23 jugadores, el cuerpo técnico, la afición y todos queremos salir de esta situación.