NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Segunda B | Villa de Santa Brígida

Caos total: derrotas, deserciones y deudas

El equipo va directo a Tercera lleno de conflictos

I. S. A.

El Villa se desintegra. Y a todos los niveles. En el deportivo, con una situación clasificatoria que apunta a su futuro en Tercera División, huelgan comentarios. El equipo es último, sus números son los peores del grupo y los síntomas de reacción que perseguía Pacuco Rosales se han quedado en nada. En lo que respecta al vestuario, las marchas de Pereyra, Abraham y Álex Castro evidencian una dudosa implicación de algunos futbolistas que han optado por asegurarse una liquidación temprana a seguir en el proyecto hasta el final. Tampoco se salva del apartado de agravios el económico. El club siempre ha gozado de fama impoluta en lo que respecta a nóminas y ausencia de deudas. Eso ya no se da. Desde la directiva se ofrecen pagarés a cobrar, en algunos casos, en diciembre, por lo que ha pasado a mejor vida la política estricta y puntual en materia monetaria.

Pacuco Rosales, que se irá en junio, algo ya público y notorio, aguanta el temporal agarrándose al kilometraje profesional que tiene a sus espaldas: "Es complicado competir así, sabiendo que la suerte está casi echada y que algunos profesionales se han ido, con lo que el potencial del grupo se debilita. Pero yo nunca tiro la toalla y así se lo he hecho ver a los jugadores. Es más, les he felicitado por el partido que hicieron ante el Universidad, aunque al final no nos acompañara el marcador".

"Todos nos imaginamos ya lo que nos puede ocurrir dentro de poco y la gente lo va asumiendo. Las diferencias hacen imposible pensar en que llegará el milagro, aunque en el fútbol se ha visto ya de todo. Lo que pido a los jugadores es que vayan semana a semana y se centren siempre en el partido más inmediato", solicita el preparador.

Con todo, en el Villa el ambiente ya denota los malos augurios. Hay un clima de interinidad en todo y los profesionales piensan más en sus salidas de futuro que en las alternativas a medio y corto plazo. Así se escribe la actualidad en el Guiniguada.