El Nàstic barre a la Real, pero se estrella en 'Zubi'

Decíamos en la previa que la Real no era superior al Nàstic. Y no lo fue. Es más, fue muy inferior. O los grana muy superiores, como quieran verlo. El resultado no lo dice, pero sí el juego y las ocasiones. Ferrando fue valiente y sacó toda la artillería desde buen principio. Paradójicamente, al equipo lo único que le faltó fue el gol. Pero lo de ayer fue más cuestión de mala suerte que otra cosa. Eso y Zubikarai (Zubi para los amigos), que lo paró todo.

Da rabia, pero hay que dedicar ni que sean cinco líneas al árbitro. Su cometido estaba claro: ayudar a la Real. Se inventó un penalti (mano inexistente de Mairata) y cosió a tarjetas al Nàstic. Él no falló, sí la Real, que naufragó con otro invento de su técnico en forma de sistema. Rubén Pérez abortó la única ocasión clara realista: Abreu tiró el penalti y Rubén, excelso, lo desvió con una pierna. A partir de ahí, y durante toda la segunda mitad, festival del Nàstic a todos los niveles. Brillante atrás, con Medina secando a Abreu. Sublime en el mediocampo, con Diop y Bauzá dando orden al equipo. Y en la línea de los últimos partidos en ataque, con N'gal, Víctor y José Mari haciendo daño de verdad. El único pero -por así decirlo-, el gol. No llegó porque Zubikarai paró mucho y porque los palos (hasta dos tuvo el Nàstic) lo impidieron.

IrReal.

Lo será que el conjunto donostiarra ascienda a Primera jugando como ayer. Salvo el penalti, sólo se le recuerda una ocasión de Mikel González, que ni siquiera fue entre los tres palos.

En cuanto al Nàstic, Ferrando debe seguir siendo fiel a este estilo ofensivo. Con los cracks en el campo, el nivel general del equipo se eleva increíblemente. Ganará, empatará o perderá, pero pinta a que el Nàstic dará espectáculo de aquí al final de la temporada.

Lillo: "El punto no sabe mal del todo"

"Haciendo una lectura cronológica del encuentro, puede parecer escaso el punto. Lo que pasa es que analizando el partido en su globalidad, y teniendo en cuenta todas las circunstancias que se dieron, con las paradas de Eñaut (Zubikarai) y las ocasiones del Nàstic en la segunda parte, el empate no sabe mal del todo. ¿Abreu? Le he visto tirar nueve o diez, y todos los había metido. Lleva tiempo en esto y si alguien tiene que fallar mejor que sea él".

Ferrando: "Que no nos arbitre más"

"No quiero hablar del árbitro, pero es de fotografía lo que hizo. Que no nos pite más, por favor. Hicimos un partidazo, como ante Córdoba, Levante... Dominamos todo el encuentro y el árbitro, con el penalti, metió a la Real en el partido. Nos queda mal sabor de boca, pero el equipo estuvo espectacular. Muchísimo orden, sacrificio... Estábamos convencidos de nuestras posibilidades. Medina estuvo perfecto. Si no hay nada raro, repetirá".