Clasificación Mundial 2010 | Bolivia 6 - Argentina 1
Argentina no estuvo a la altura y encajó seis goles
Repaso monumental de los andinos a los de Maradona
Cuando Metralleta Martins anotó el primer gol en el minuto 11, Carrizo ya había salvado cuatro veces a Argentina. Para este partido Maradona había colgado en el vestuario un cartel referente a la altura: "Hay que enfrentarla, gambetearla y hacerle goles". Argentina simplemente ni compareció en La Paz. Desde el 6-1 que encajó ante Checoslovaquía en el Mundial del 58 no encajaba tamaña derrota.
El partido arrancó con un chut desde 40 metros de un estelar Alex da Rosa. Síntoma de lo que se le venía encima. Una consecuencia de la altura son los extraños en el vuelo del balón. Los locales exprimieron eso: Da Rosa, Reyes, Botero, Torrico... Un auténtico pim, pam, pum. La albiceleste agonizaba sin un 10 y sumida en el caos que motivó la revolución de Maradona, que aniquiló las bandas enviando a Maxi a la izquierda para ubicar en la derecha a Lucho. Messi no apareció hasta el minuto 20, al culminar con una vaselina sutil una galopada que apoyó en una pared con Tévez. Arias la sacó por milímetros. Hasta que Lucho, de tanto ver chutar a los bolivianos, probó. El balón hizo un extraño y el meta Arias el resto. Empate. Pero en Bolivia no cundió el desánimo y a los 34 minutos Zanetti atropelló a Da Rosa en el área. Penalti y gol de Botero. Los andinos no bajaron el ritmo y tras un córner argentino un saque largo de Arias finalizó con testarazo a la red de Da Rosa. Al descanso, Argentina sufría un baño ante Bolivia.
La segunda mitad confirmó la sensación de la primera parte. Bolivia no bajó el pistón y volvió a obtener premio a los 54 minutos cuando Botero cabeceó a la red un centro desde la derecha. Las bandas eran autopistas bolivianas y la medular un rondo andino. Y ante este panorama, Maradona no tuvo capacidad de encontrar soluciones al repaso recibido. Para más inri, Di María se autoexpulsó, Botero completó el hat-trick y Torrico se apuntó. La primera derrota de Maradona fue escandalosa: 6-1. En La Paz, ante Bolivia, Argentina no estuvo a la altura. Ni siquiera a la futbolística.