Iván Hernández se perfila como secante de Zigic

El delantero serbio Nikola Zigic es el principal temor de los rojiblancos, pero Preciado ya estudia un antídoto con la altura de Iván Hernández. El central madrileño comentó que el delantero balcánico "es el jugador más alto de la Liga, pero todavía no me enfrenté a él".

De todas formas, Iván considera que "es complicado de marcar, porque si utiliza el cuerpo y la altura es difícil llevarle el balón de cabeza". Asimismo, tiene en cuenta que "hay que estar muy atentos a las segundas jugadas, por las incorporaciones de otros jugadores". El defensa rojiblanco expuso que "es un futbolista que para la altura que tiene se desenvuelve muy bien".

En un análisis del conjunto cántabro, Iván Hernández señaló que "no suele jugar muy directo y le gusta tocar el balón, pero no sólo busca a Zigic, ya que tiene otros recursos". El rojiblanco apuntó a "Jonathan Pereira, a quien conocemos del año pasado, porque puede que si nos centramos en Zigic, nos olvidemos de los demás". En este aspecto señaló que "es un equipo que tiene peligro también por las bandas".

Iván tiene la referencia del Racing correspondiente al partido de la primera vuelta, que "fue muy igualado, pero quedó marcado por una jugada de infortunio, al dar el balón en la cara de Diego Camacho, porque si no se produce ese rebote, hubiera acabado en empate".

El central rojiblanco calificó el encuentro ante el Racing de "muy importantes", si bien matizó que "ahora todos los son, hasta lograr la permanencia". Iván señaló que "el Racing es un rival directo, está empatado con nosotros en la clasificación y una victoria nos permitiría dejarlo detrás". Su recomendación en ese encuentro es "imponer nuestro ritmo, que es lo que mejor resultado nos da, para llevar el partido a nuestro terreno". El madrileño añadió que "cuando se ganen tres partidos estaremos más tranquilos". Es la premisa marcada para no deponer de los demás.

"A veces, un punto sabe a gloria"

Iván Hernández fija la permanencia en "tres victorias" de los diez encuentros restantes. Según dijo, "hay once equipos en la zona de abajo y nadie quiere bajar", por lo que entiende que "a veces un punto sabe a gloria". El madrileño confía en "sacar puntos en esos dos encuentros que tenemos en casa, pero si no es posible quedarán otros ocho", pero espera que "con la ayuda de la afición podamos sacar los puntos necesarios cuanto antes".