Liga Adelante | Sevilla At. 3 - Murcia 3
Cuatro penaltis y un empate
Lesma López desata la locura en un partido que el Murcia ganaba 0-2 a falta de media hora
Uno tiende a creer que ya nada puede sorprenderle en el fútbol, pero lo cierto es que este mágico juego siempre esconde un as en la manga. Ayer, esa carta guardada fue un árbitro que se erigió en triste protagonista del pobre empate que el Real Murcia se trajo desde Sevilla. Nada menos que cuatro penaltis en 20 minutos señaló Lesma López, que llevó a la locura un partido que los de José Miguel Campos dominaban con soltura por 0-2 cuando restaba menos de media hora para el final. Habría que repasar los viejos libros de la historia de la Liga para saber si lo realizado por el trencillas madrileño tiene antecedentes. Pero vayamos por partes, porque las hay.
Tras una primera mitad soporífera, el Murcia hizo honor a su mayor calidad y experiencia para marcharse al descanso con ventaja gracias a Ochoa. El central fusilaba a Vargas tras un flojo rechace en el área y daba un injusto premio a los grana. Esa desventaja local la quiso neutralizar Galeote con tempraneros cambios en la segunda parte, pero el triple movimiento del filial obtuvo una severa respuesta a cargo de un ex suyo, Bruno. Este hacía efectiva la enésima buena jugada de Capdevila y parecía sentenciar en el 62'.
Locura.
Sin embargo, el guión reservaba un papel de protagonista a Lesma López. El madrileño entendió como penas máximas tres derribos sobre Pouga a cargo de Elía, Mejía y Peña. Los dos primeros fueron claros, y el filial empató. Acto seguido, un barullo en el área local terminó de igual forma: penalti. Bruno hacía doblete y devolvía la tranquilidad a un nervioso Campos. Pero todavía quedaba lo mejor: el show del cuarto penalti. Pouga, en plena pugna con Peña cae producto de la gravedad y el linier equivoca al colegiado quien, no contento, manda repetir el lanzamiento detenido por Elía. Éste lo vuelve a parar, no así el rechace. El filial empataba, la grada reía y Campos se desesperaba, sobretodo tras ver cómo De Lucas (tres veces) y Mejía (en el 95') pudieron rescatar dos puntos que parecían suyos.
El detalle: lío con las equipaciones
El Murcia sólo llevó a la Ciudad Deportiva sevillista una equipación. Al ser sus calzonas de color negro, Lesma López advirtió que no se jugaría el partido si coincidían con las del filial, también negras. Al final, el conjunto sevillista accedió a jugar con toda su equipación de color blanco para evitar polémicas.