Girona y Las Palmas calibran sus urgencias

El Girona quiere despejar todas sus dudas consiguiendo la primera victoria de la segunda vuelta ante una Las Palmas que se presenta a la cita con el descenso cosido a los talones. El botín de puntos que acumuló en la primera vuelta continua dando réditos pero da la impresión de que el conjunto rojiblanco es como un coche descendiendo una cuesta en punto muerto; hay que meterle una marcha para evitar que se pare o se estrelle. Ganar permitiría oler a permanencia; el empate, mantener la incercia y con la derrota, las orejas del lobo podrían asomar en el horizonte.

Raül Agné confiará el ataque a Gabri y Paco Esteban. Velocidad, habilidad y, sobretodo, hambre de futbol para apuntarse un encuentro que podría decidirse a la contra si el conjunto amarillo es presa de los nervios que acompañan a las urgencias. La teoría diría que sujetar bien a Marcos Márquez es garantizar, como mínimo, el empate -en esas estará Cañas- pero al Cid amarillo escuderos no le faltan y todos tienen el vicio del buen futbol. Uno de ellos, Pitu, vuelve a su tierra tras estrenarse como goleador.