El Celta desperdicia un 0-2

El conjunto alicantino igualo la contienda a base de constancia, mientras el equipo gallego pecó de conformismo durante muchos minutos y acabó costándole muy caro en el resultado.

El Celta pareció dejar sentenciado el partido en la primera media hora de juego, en la que marcó dos goles a un Alicante que desperdició la posibilidad de adelantarse en el marcador al fallar un penalti a los diez minutos de juego.

El meta Notario adivinó por dónde iba a lanzar Azkoitia la pena máxima y como el tiro del centrocampista alicantinista tampoco iba bien colocado, el balón salió rechazado lejos de la portería.

Del probable 1-0 se pasó al 0-2. Primero Dani Abalo batió al meta Queco Piña tras una precisa y preciosa vaselina, cuando se encontraba escorado en el área. Y a la media hora de juego fue Renan el que, de falta, batió al portero local.

Tras el descanso, el Celta se vio con el trabajo hecho y dejó hacer a un Alicante que se volcaba sobre el área gallega pero sin muchas ideas. Por su parte, el Celta, en apenas dos minutos, gozó de tres ocasiones para sentenciar el partido. El portero Queco Piña lo evitó.

Y finalmente el Alicante se metió en el partido con un gol de Azkoitia a falta de poco más de un cuarto de hora para el final. Tras el 1-2, al Celta le entraron los nervios y vio como el portero Notario realizaba una parada inverosímil para evitar el empate de Pedro.

Pero la fe del Alicante le permitió empatar a falta de un minuto para el noventa, gracias a un nuevo penalti que esta vez sí anotó Rafa Jordá tras una presunta falta del defensa Rubén en un saque de falta.