Romaric ya justifica los ocho millones que costó

El fichaje de Ndri Romaric el pasado verano provocó controversias entre la afición. Llegaba con sobrepeso, tras el desembolso de ocho millones de euros, y con la difícil papeleta de sustituir a Keita, la revelación de la pasada temporada. Ocho meses después se destapa como el jugador que más partidos ha disputado con el Sevilla esta temporada (40 partidos oficiales, de los 41 disputados). Sólo faltó en la ida copera ante el Depor. Asimismo, es el único de la plantilla que ha participado en los 27 encuentros de Liga.

El costamarfileño reconoció ayer que sus inicios en el Sevilla no fueron fáciles, pero asegura que comienza a verse su mejor versión, aquella que encandiló a Monchi cuando jugaba en Le Mans: "Me siento importante, con peso en el equipo. El juego en Francia es diferente y me he tenido que adaptar. Las críticas son lógicas porque el Sevilla es un gran club. Han llegado jugadores nuevos y aún tenemos que encontrar el equilibrio entre la defensa y la delantera".

Sólo lleva dos goles en su cuenta particular -uno en la Liga y otro en la UEFA- pero asegura que últimamente juega en una posición más ofensiva, con la que tiene más llegada. Prefiere jugar de mediocentro pero no le incomoda actuar por la izquierda si el entrenador se lo pide.

El presidente apunta más alto

José María del Nido se muestra satisfecho por el trabajo que viene realizando el costamarfileño. Aún así, no tiene duda en señalar que el punto álgido del centrocampista aún está por llegar: "Seguro que la próxima temporada será la de Romaric". El internacional presume de equipo: "He firmado por cinco años y, por el momento, este es mi club. Estoy aprendiendo mucho. Me gusta el equipo y la ciudad para quedarme".