Gámez reaparece entre las alternativas a Alves

El lateral derecho es uno de los quebraderos de cabeza de Jiménez y el propio Monchi, quien ha reconocido que el equipo, mientras Konko está lesionado, tiene carencias en ese puesto. Alves ha dejado un panorama oscuro que ninguna de las alternativas planeadas ha sido capaz de aclarar.

Ahora reaparece Jesús Gámez como opción de futuro. El malaguista ya estuvo en la agenda sevillista el pasado verano. El análisis de las carencias y necesidades es evidente. Crespo fue una apuesta por lo de la casa que el técnico acabó desechando. Konko se chupará el año entre lesiones y cierta inadaptación. Y Mosquera acumula errores suficientes para entender que no puede jugar ahí. El futbolista, incluso, le pidió al entrenador que no lo ubicara más en esa zona. Pero es la única alternativa que Jiménez ha encontrado. Ante este panorama, Adriano aparece como la cuarta opción que, curiosamente, es la que más prestaciones ofrece.

Todos estos datos descubren la necesidad de retocar el perfil diestro la próxima campaña. En principio, Konko seguirá, aunque su representante se ha encargado de deslizar en Italia su deseo de volver. Tras un año en blanco será complicado que reciba demasiadas proposiciones. Además, Monchi quiere darle una segunda oportunidad, ya que piensa que acabará rindiendo.

La experiencia acumulada este año indica que no es conveniente jugársela otra vez a la misma carta. Por eso los técnicos maduran la posibilidad de fichar a un futbolista de perfil bajo, con capacidad para ser titular y cuya operación encuadre en unas cantidades coherentes. Bruno era una alternativa. Gámez, una opción más real ahora. Las relaciones entre Del Nido y Fernando Sanz son extraordinarias. La crisis llegará al fútbol y se medirán los gastos. Duda y Lolo podrían entrar en la operación de Gámez como moneda de cambio para reducir las cifras del dinero en efectivo. El caso del luso requiere una solución urgente por parte del Sevilla para obtener una rentabilidad. El contrato de Duda finaliza en 2010, por lo que este verano Monchi deberá buscarle una salida. Las ofertas económicas serán escasas, por lo que convertirlo en pieza de cambio por Gámez gana enteros.