Ronaldo: "Todavía tengo que perder cinco kilos"

Ronaldo ha tenido que poner freno a los desmesurados elogios que provocó su gol de cabeza al Palmeiras, el primero que ha marcado desde que se lesionara en febrero de 2008 con el Milán. "Ronaldo es gol", "Ronaldo resurge", "El Fenómeno brilla", "Ni el mayor de sus seguidores imaginaba un reencuentro tan épico con el buen fútbol y el gol", son algunos de los titulares que le ha dedicado la prensa brasileña. Pero Ronaldo prefiere ir paso a paso.

"No tengo todavía la explosividad y agilidad que todo el mundo conoce. Nunca dije que estuviera al cien por cien de mis posibilidades. Lo cierto es que aún debe perder un poco de peso, debería pesar cinco kilos menos que ahora", dijo el delantero tras el entrenamiento de ayer en las instalaciones del Corinthians en Parque Ecológico. Mano Menezes, su entrenador, le hizo trabajar siempre en el grupo de suplentes.

Bruno Mazziotti, el fisioterapeuta personal del astro, ofreció más información del estado físico del ariete: "Si se observa el rato que jugó contra Itumbiara (27 minutos) y luego los minutos disputados ante el Palmeiras (31), se nota la mejoría. Ahora está para jugar unos 60 minutos". Mazzioti puso plazo para que Ronaldo vuelva a la absoluta normalidad: "Aseguro que entre tres y cuatro semanas él estará en plena forma".

El propio Menezes continuó con el discurso prudente iniciado por el futbolista: "Una cosa es intentar un regate en el minuto 90 y otra es hacerlo en el 15, cuando el ritmo físico es mucho más exigente. Aún no puede ser titular, hay que ir con calma". Mucho más optimista fue Vanderlei Luxemburgo, técnico que sufrió el primer gol del Fenómeno: "Tengo claro que si él quiere, volverá a lo más alto y será convocado por Brasil para el Mundial 2010".

Mientras, en el municipio de Presidente Prudente (que albergó el partido en el que Ronaldo volvió a marcar) ya se frotan las manos: "No sé cómo medir la importancia de ese gol para el municipio. La alambrada del estadio (que se rompió en la celebración de Ronaldo) se va a convertir en un punto turístico que todos querrán visitar", dijo a O Globo Alfredo Penha, concejal de Fomento de la localidad paulista.