El Huesca impone su ley y sigue imparable en casa

El encuentro entre Huesca y Elche fue uno de los más extraños que recordamos, en su desarrollo, en sus anécdotas y en su resultado. De inicio, lo que se esperaba, dos equipos bien plantados en el campo y con sus guías apareciendo. Santos y Sastre (la Doble S si jugasen en el mismo equipo) aportaron la mayor enjundia del choque. Eso sí, la presión ejercida en el centro del campo hacía que las salidas de balón fuesen atropelladas y nadie llegase con claridad al área contraria.

En esta tesitura, el balón parado se hacía indispensable y, tras varias intentonas azulgranas, eso sí, precedidas de un mano a mano de Saúl que Eduardo solventó con su habitual maestría, Luis Helguera, al saque de un córner, fue el más listo de la clase y rematando de forma extraña (en la televisión parece mano) alojaba el balón en el fondo de la portería de un sorprendido Willy. Mazazo importante y el que da primero da dos veces, o casi, porque nada más adelantarse, el Huesca borda otra combinación que Jose, sombrero incluido, estampa en el larguero de la meta franjiverde.

En la reanudación, el Elche se fue arriba con todo, a través de su Beckham, el omnipresente Santos, pero una jugada desgraciada de Wakaso, que protestó con energía una posible falta de Roberto, posibilitó que el nueve del Huesca la cediera de lujo para que Rubén, con un toque sutil, dejase las cosas muy bien para los locales y muy complicadas para los visitantes.

A la contra.

Lo lógico habría sido que el Huesca se enfriase, pero no. El Elche se abrió a la desesperada y el Huesca se limitó a esperar tranquilamente su oportunidad. Así llegó el tercero en una gran jugada de Sastre que Jose, otro jugón, remachaba con la testa a la red.

Se mascaba la goleada, pero Del Cerro Grande la cortó con un dudoso penalti que David Fuster transformaba en gol. Pudo ser el principio de una reacción que no llegó: sólo al final, Paco dio pie con una jugada dudosa a que Del Cerro señalase un nuevo máximo castigo. El propio Fuster cerraba el encuentro, ya que ni dio tiempo a sacar de centro. El Huesca ve cada vez más cerca la salvación y el Elche deberá seguir confiando en su buena línea, la que exhibió ante Tenerife y Zaragoza.

Error arbitral al descanso

Garrafal error del colegiado Del Cerro Grande en la señalización del final de la primera parte. Envió a los jugadores a vestuarios en el minuto 44:38, y volvió a llamarlos para jugar escasamente 30 segundos. Nadie entre los presentes había vivido nunca una situación similar.