El Córdoba dirá a qué puede aspirar el Girona

El Girona navega esta temporada sin ansiedad, con un rumbo que lo ha mantenido durante todo el campeonato sin sobresaltos en la cómoda mitad de la tabla. Pero la plantilla es consciente de que el partido frente al Córdoba es un termómetro para calibrar cuál será el grado de sufrimiento que tendrá que soportar la afición al final de la presente temporada.

Pese a tener un amplio margen sobre la zona peligrosa, en el Girona son conscientes que no es suficiente como para tomarse el encuentro sin tensión: "No podemos despistarnos porque nadie quiere estar abajo y todos van a poner las cosas difíciles desde ahora y hasta el final", asegura el delantero gerundense Arnal Llibert. Entre el Córdoba, que marca la salvación, y el Girona hay un cómodo colchón de ocho puntos, pero el portero Rafa Ponzo confiesa que a nadie se le pasa por la cabeza pisar el freno: "Sería muy importante alejar a un rival directo a once puntos, nos daría mucha tranquilidad para afrontar el resto de los encuentros con algo más de calma".

Tranquilidad, sobre todo, para afrontar un calendario como visitantes nada factible (Rayo Vallecano, Real Sociedad, Zaragoza y Hércules, casi todos ellos candidatos al ascenso de pleno derecho) y que casi obliga al Girona a recuperar la solvencia en Montilivi: "Tenemos que volver a hacernos fuertes en casa, sobre todo en un partido tan importante como este", dice el ex jugador del Nàstic Chechu. El Córdoba es un rival que llega al choque empatado a puntos con Eibar y Alavés, dos equipos sumergidos en las plazas de descenso, y el defensa Migue reconoce que en Girona se toman el partido como una buena oportunidad para poner tierra de por medio: "Una victoria serviría para coger una importante distancia y nos daría tranquilidad porque una vez te metes abajo es muy complicado salir porque todos quieren hacerlo".

El final.

Aunque una derrota no sería una catástrofe, la lectura es que del resultado que se dé en el partido se podrán sacar conclusiones sobre cual será el rol del Girona. Parecía que estaríamos ante uno de los ascenso más baratos de los últimos años, pero las últimas jornadas confirman la tendencia de éste a encarecerse. En el Girona no quieren perder de vista lo que pueda ocurrir por arriba.