Pablo Pinillos
"No me voy a rendir; si algo hice siempre fue luchar"
Valera le ha arrebatado el puesto en el lateral. Pablo no alza la voz ni tuerce el gesto. Sólo trabaja: "Cuando tenga una nueva oportunidad no puedo dejar escaparla".
Ésta es la primera vez que es suplente de manera crónica en toda su carrera. ¿Cómo lo está viviendo?
Intento llevarlo lo mejor posible. Todo es nuevo para mí. Miento, creo que una vez fui suplente por rotaciones o algo así. Nunca me he lesionado afortunadamente y siempre fui titular. Se hace raro. Pica el gusanillo. Hay que saber amoldarse y no hay que cambiar la forma de ser. A todo jugador le gusta que llegue el domingo y pueda competir. Ahora intento ayudar todo lo que puedo.
Pues se le ve demasiado serio. ¿Está tan afectado?
Hombre, durante toda mi carrera tuve el privilegio de ser fijo en las alineaciones y uno no se adapta a no jugar el fin de semana. Un técnico que tuve decía que nos pagan por entrenar y que el que juega es un afortunado. Ahora me toca vivir otra experiencia y lo que intento es ser una alternativa sin crear problemas.
¿Se fue justo con usted?
No lo sé. Yo soy respetuoso con todas las opiniones. Hay valoraciones que no han sido justas y otras que he compartido. Hubo de todo.
Vamos a analizar algunas. ¿Físicamente está peor que otros años?
En absoluto. Ni tampoco tiene la culpa Fernando Gaspar de nada como se decía. Él trajo otros métodos, que no peores, y la gente está genial. Lo que pasa es que el equipo no empezó bien y ahí falla todo y todos.
¿Está jugando Valera porque lo está haciendo muy bien o porque usted bajó el nivel?
Ésa es una pregunta para el entrenador. Yo lo que digo es que trabajo de la misma manera que siempre. Estoy en forma y desde que vinimos de vacaciones hice buenos partidos ante el Valencia en Copa y en Sevilla en la Liga. He demostrado que cuando el entrenador quiera puede tirar de mí con total confianza.
¿Muñiz le dio explicaciones al respecto?
Nosotros hablamos mucho. Al venir de Navidad me dijo que trabajara de la misma manera que lo estaba haciendo, con tanta predisposición. Me dijo que era el puesto con mayor igualdad y que habría minutos para los dos. Nada más.
¿Se lleva bien con él?
Nuestra relación es perfecta. En lo deportivo y en lo extradeportivo. Nos vemos continuamente en el colegio con los niños y charlamos mucho. No hay problema alguno. Sabe que en mi siempre tendrá un apoyo y una ayuda.
¿Cuál ha sido el momento más duro de estos meses?
El domingo, cuando el técnico da la charla y no estás en el once. O cuando mi hijo me pregunta por qué no juego... Pero a partir de ahí, sólo pienso en el equipo. Cuando el lunes voy a entrenar lo sigo haciendo con la ilusión de que en el siguiente partido jugaré. Si salí de repente, puedo entrar de repente. Viene muy bien no saber quién va a salir hasta el día del partido. Así nadie se relaja y todos tienen esa motivación. La tensión es fundamental.
Muchos pueden pensar que, por su edad (34 años), esta situación es un claro indicativo de que está al llegar su fin...
Ante eso me rebelo. La edad no tiene nada que ver. Ha habido jugadores con 37 y 38 años que nos han dado un ejemplo. Carboni en el Valencia lo hizo de maravilla siendo mayorcito. Me encuentro perfectamente y el que me ve entrenar a diario lo sabe. Cuando vea que no aporto me iré y ya está, pero me queda cuerda para años.
¿Está situación le ha hecho replantearse algunas cosas?
De momento no. Sólo debo seguir trabajando como siempre y aprovechar el año de contrato que me queda. Si algo he hecho en la vida es luchar. No me rindo. Todo lo he conseguido por trabajo, tesón y esfuerzo. Lo que sí he modificado son los entrenamientos. Ahora me paso más tiempo en el gimnasio. El sábado que fuimos al Bernabéu, no jugu y al día siguiente que teníamos fiesta salí a correr con los consejos de Gaspar. No hay que perder el ritmo. Cuando vuelva a tener una oportunidad no puedo dejar escaparla.
Pero, a pesar de sus ganas por volver al once, reconocerá que la defensa está bien
Sí. Y no sólo eso, sino todo el sistema defensivo. Hay mucha solidaridad. Somos de los menos goleados y eso es por culpa de todos.
Ante el Villarreal no bastó. ¿Qué pasó?
Un poco de todo. Empezamos haciendo un gran fútbol pero no supimos mantener esa superioridad y esa forma de presionar. Ellos tienen mucha calidad y eso cuenta...
A Oriol le pasó más o menos lo que a usted. ¿Cómo se lo tomó? ¿Le ayudaron?
Cuando no juegas siempre es un palo. Es normal que te enfades. Lo malo sería si no te coges una rabieta. Estarías acomodado. A mi me pasó el día del Barça. En Sevilla lo hice bien, no jugué y claro que te cabrea. Es lógico. Pero es que hay mucha competencia
Ahora llegan cuatro partidos claves para saber por qué se va a luchar. ¿Hay optimismo?
Mucho. Hemos demostrado que tenemos ambición. El Barça y el Madrid se escaparon vivos. Este Racing tiene una gran mentalidad desde que ganamos en Valencia y es muy difícil ganarle y meterle un gol.
¿Pensaba que Zigic iba a ser tan importante?
Sabíamos que iba a dar mucho. Lo que nadie esperaba era que marcara tantos goles en tan pocos partidos. El Valencia se ha equivocado con él.
Por último. ¿Está solucionado el tema de los pagos por parte del club?
Sí. El presidente acertó en ir al vestuario y transmitir a todos tranquilidad. Los que llevamos tiempo en esta casa sabemos que aquí se ha cumplido siempre religiosamente. Yo podría dar una conferencia sobre impagos, encierros de protesta (risas). No creo que eso se dé aquí aunque la crisis no esquiva a nadie