Épico Almería: empata con diez y remonta con nueve

Almería vibró como nunca con su equipo. Se atisba reconciliación. Porque pocas cosas unen tanto como compartir el sufrimiento. Y el Mediterráneo sufrió de lo lindo. Se fue con 0-2 al descanso ante un Valladolid serio, trabajado, espejo de Mendilibar. El marcador producía sensaciones enfrentadas. Los pucelanos, casi pellizcando Europa. Los rojiblancos, con vértigo por su cercanía al descenso. Pero la fe ha hecho más por el fútbol que muchos entrenadores.

En Pucela se estarán preguntando cómo se fueron los puntos. El golazo de falta de Pedro León y el tanto de Goitom habían matado al Almería, inoperante en la primera mitad. Su resurrección también tiene mucho de demérito de los vallisoletanos. Regaló el balón al rival tras el descanso, pecado mortal. El gol de Crusat espoleó al Mediterráneo y empezó a rugir. Entonces llegó la expulsión de Bruno. Más madera para los de Hugo, que empataron por medio de Uche y con la colaboración de Nano y Justo Villar, que hasta entonces había sido de los mejores. El árbitro exageró una acción de Uche y dejó al Almería con nueve. Una invitación a la épica. En una acción disparatada, Justo se disfrazó de villano y permitió a Negredo marcar desde fuera del área con la puerta vacía, sin nadie a un kilómetro a la redonda. El delirio llegó a las gradas del Almería. Nano dejó a los suyos con diez e igualó fuerzas. Pedro León tuvo la última, de falta también. No entró, en ese gol no habría épica.

El detalle: récord de rojas almerienses

El Almería va camino de récord esta temporada. Y no precisamente por algo positivo. Las rojas directas a Bruno y Kalu Uche son la sexta y la séptima del presente curso. Lleva nueve expulsiones el conjunto rojiblanco si se suman otras dos más por doble amonestación.