Liga BBVA | Racing 1 - Villarreal 1
Zigic frenó al Submarino al marcar en fuera de juego
Cazorla empató y Toni Moral reclamó un penalti a los 4'
El Sardinero sigue cohibiendo a este Racing. No es casualidad que el equipo de Muñiz sea uno de los conjuntos españoles que menos veces ha ganado en casa (dos) y al que más le cuesta marcar (once tantos). Ante el calor de su gente no es capaz de hacer lo que muestra fuera. Se encoge. Ni defiende con la misma solvencia ni contraataca con idéntico ardor. Por eso ayer volvió a empatar, aunque el Villarreal también tuvo demasiado que ver en su atasco. El equipo de Pellegrini dio una lección de cómo tratar el balón. Esquivó el agobio inicial del Racing y, desde entonces, fue claro dominador. Si no ganó fue por su poca puntería y debido a que Toño imita a Superman.
Toni Moral tuvo la primera oportunidad de desnivelar un partido que pudo coronar a cualquiera, aunque sólo el equipo visitante pusiera de su parte para merecerlo. El extremo aprovechó en el minuto 4 un gran pase de Munitis para burlar a la defensa y, cuando iba a batir a Diego López, cayó. Fuentes pareció que le derribaba aunque la moviola arrojó dudas. La víctima jura que hubo falta y que su espinillera tiene huellas. Pero eso ya da igual. Undiano no se pronunció.
Menos mal que Zigic volvió al rescate mediada la primera parte e hizo olvidar la polémica. El serbio finalizó con maestría una jugada colectiva en la que Serrano le puso un centro medido para que cabeceara en claro y decisivo fuera de juego. Undiano también calló.
Metamorfosis. Ahí comenzó a gustarse el Racing pero, poco después, desapareció. El Villarreal acumuló jugones en la medular y no sólo se adueñó de la posesión, sino que también lo hizo de la zona de rechace. El balón cambió entonces de dueño. Rossi y Pires comenzaron a intimidar. Sin embargo fue Cazorla el que logró el empate con un disparo seco que desnudó al Racing. Éste defendía ese córner con once y se olvidó de colocar a alguien a la salida, donde aguardaba el pillo de Santi.
La segunda parte acentuó el dominio del Villarreal. Salvo zarpazos cántabros, fue mejor aunque manoseó demasiado el cuero sin imprimirle profundidad. Aun así, Rossi pudo sentenciar dos veces sin éxito y hacer que el Submarino zarpase del Cantábrico con la recompensa, en forma de puntos, a un fino juego en extinción.
El detalle: homenaje a la niña sevillana
Racing y Villarreal tenían pensado durante la semana saltar al césped con camisetas con la foto de Marta del Castillo y una frase: "Marta, te esperamos". Sin embargo, las noticias que presuntamente la dan por fallecida cambió el plan. Hubo camiseta pero sin frase.