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Liga BBVA | Almería - Valladolid

Infierno mediterráneo

Casi 20.000 personas esperan al enigmático Valladolid.

<b>LA EXPEDICIÓN DEL VALLADOLID LLEGÓ POR LA TARDE A ALMERÍA. </b> La expedición del Valladolid, encabezada por Mendilibar, llegó ayer por la tarde a la capital almeriense. El equipo hará noche en el hotel Tryp Indalo, desde donde se dirigirá al estadio al mediodía de hoy. En la imagen vemos a Borja firmando un autógrafo a un seguidor.
carlos barba

Responde Almería a la llamada del presidente Alfonso García como nunca lo había hecho. La situación que vive el equipo haría pensar que es un ejercicio de responsabilidad de la gente, que entiende que los rojiblancos necesitan sus impulsos más que nunca. Pero la realidad es que responde más a cuestiones económicas que a otra cosa. Es decir, es tan barato ir al partido que te sale más caro quedarte en casa. De una forma u otra, resulta que el Mediterráneo va a ser un infierno. Porque hay casi 20.000 personas esperando al Valladolid.

El fuego no distingue a quién quema. En partidos calientes, puede pasar de todo. A estas alturas, eso no va a asustar a Mendilibar y a Víctor, de nuevo capitán general. Es enigmático este Valladolid. Lo mismo es un cohete que se atasca, se gripa. Ahora está en fase ascendente. Asaltó el Calderón (aviso a navegantes) y pudo con el Athletic. Hoy sabe que juega un partido que puede valer más de tres puntos. Si gestiona la ansiedad rival, puede irse a 13 puntos del descenso. Trabajo hecho. Para eso cuenta, decíamos antes, con Víctor. Perenne, viene de marcar dos goles. Lucha contra defensas más grandes, rápidos y jóvenes a la misma vez que desdice las verdades del tiempo. Ya se sabe que hay rockeros que nunca mueren.

Goles marcan a pares la pareja de moda en Almería. Los únicos que están por encima de la media son Negredo y Uche. Ocho goles en cinco partidos. El efecto Hugo fluctúa en el resto (anuncia cambios), pero ha sido mano de santo en los dos delanteros. Se habrán contagiado de lo único que se sabe que le ha sobrado a Hugo toda la vida: gol.