"El futbolista es atleta, pero también piensa"

A la espera de que se produzca la primera victoria de la era Pochettino, lo que no cesan son las novedades durante la semana, en las sesiones preparatorias. La presencia en el cuadro técnico de Feliciano di Blasi, que volvió al club por deseo expreso del entrenador, ha reavivado a la plantilla. Como gusta de recordar al italiano, la mejora es psicofísica. Por un lado, los jugadores se ponen físicamente a tono. Por otro, se han vuelto a ilusionar. A enganchar a esta escalada hacia la salvación que escenificaron ayer mismo, en el Estadi Olímpic.

La penúltima de las sorpresas que Di Blasi tenía preparadas a sus futbolistas fue un ejercicio que consistía en subir y bajar las escaleras de la tribuna de Montjuïc, a diferentes ritmos. "Se trata de potenciar el sistema neuromuscular, meter fuerza en el cuerpo de los jugadores", desveló el preparador físico a AS. "Yo utilizo mucho este tipo de pruebas, de sesiones que combinan la fuerza y la velocidad", abundó tras el entrenamiento.

De hecho, las carreras por los peldaños del Olímpic fueron un paso más sobre lo que la plantilla ya había realizado el miércoles anterior, cuando los técnicos les mandaron correr por la montaña mágica. "Es un ejercicio muy similar, encaminado a potenciar esos mismos aspectos", indicó Di Blasi.

El italiano, además, apuesta por que sus métodos dejarán atrás las lesiones en los isquiotibiales, tan frecuentes en los últimos tiempos dentro del vestuario perico. "Eso es cosa del pasado", simplificó. Pero no todo son nervios, músculos y huesos. Di Blasi trata de optimizar la motivación de los jugadores, algo fundamental cuando un equipo pasa semanas sin ganar y sin abandonar las posiciones de descenso.

Satisfecho. "El futbolista es un atleta. Ese es su principal activo, por lo que su preparación física debe ser perfecta para aguantar, correr y juega. Pero también piensa. Le da vueltas a la cabeza y en eso debemos incidir para que no tengan bajones que afecten en el juego", explicó Di Blasi, quien añadió enseguida: "Por ahora, estoy muy contento con lo que me he encontrado en ese sentido y por cómo están respondiendo a nuestras actividades". Una de ellas, por ejemplo, es disputar amistosos de 80 minutos contra equipos de la cantera.

Di Blasi, además, genera confianza a toda la plantilla. Él fue ya el preparador físico que trajo Luis Fernández en la temporada 2003-04, y con quien el Espanyol se acabó salvando. Bajo su supervisión, descendió brutalmente el rango de lesionados y subió, sobre todo en el decisivo tramo final, el nivel físico y motivacional de todos los futbolistas.

Estudia cada entrenamiento con Pochettino

Uno de los secretos mejor guardados del tándem Mauricio Pochettino-Feliciano di Blasi se guarda en los despachos de Sant Adrià y Montjuïc. "Después de cada entrenamiento nos juntamos y lo analizamos al completo. En función de las conclusiones que sacamos, preparamos de una manera u otra la sesión del día siguiente", profirió el italiano a este periódico. Algo más comedido en ese tipo de explicaciones psicofísicas se muestra habitualmente Pochettino, quien sin embargo ayer sí admitió que "viendo la intensidad del entrenamiento, queda claro que el equipo tiene motivación y ganas. Los veo bien", apostilló. Además del ejercicio en las escaleras, los jugadores se sometieron a un completo circuito físico sobre el césped de Montjuïc, lo que combinaron con balón, todo dividido en dos grupos.