LIGA BBVA | VALLADOLID 2 - ATHLETIC 1
Víctor aplaca la furia del Athletic
El Real Valladolid se agarró a su delantero Víctor y al sufrimiento colectivo para doblegar a un impetuoso Athletic Club (2-1) en un buen partido, reñido hasta el final, en el que pudo darse cualquier otro resultado.
Los vizcaínos llegaban a Zorrilla retomando el hilo de la Liga tras aparcar su sueño en la Copa. En ambas competiciones el Athletic se está "reinventando", ya que vuelve a ser un equipo hecho a sí mismo con orgullo y raza de ganador. Los rojiblancos venían de completar un mes de enero tan abarrotado en número de partidos como fastuoso en resultados. De la mano de un sevillano, Joaquín Caparrós, "los leones" han vuelto.
Sin embargo, el andaluz se vio obligado a hacer hoy dos cambios, ya que intentar meterse en dos peleas, situarse en puestos UEFA y en la final de Copa, "erosiona" las fuerzas. Una de esas variantes fue obligada por la lesión de Amorebieta, sustituido por Ustaritz. Con más 4.000 seguidores apoyando desde la grada, el Athletic presentó batalla desde el principio ante un Valladolid que casi repetía equipo con la salvedad de un central, Nano, ubicado en el lateral izquierdo y la sorpresa de Víctor, quien entró por Canobbio, lesionado a última hora.
Ya en el primer minuto se vio una muestra del ímpetu rojiblanco. Con el lesionado García Calvo en el suelo, rompiendo el fuera de juego, Fernando Llorente no tuvo compasión y disparó a puerta en lo que pudo ser el primer gol del Athletic. Ion Vélez también pudo marcar a los diez minutos tras otro remate de Llorente. Mientras tanto, el Valladolid se agarraba a Pedro León y a un Goitom tan hiperactivo como errático en sus movimientos. El sueco ya no "vagabundea" por el campo, como en sus primeros partidos en Zorrilla, pero no acaba de ser el rematador que necesita Mendilibar.
Así las cosas, fue el Athletic el equipo que más y mejor amenazó en la primera media hora de partido, aunque después el Valladolid quiso replicar agarrándose a la viveza de Jonathan Sesma. Parecía que la falta de precisión de unos y otros iba a deparar al descanso un inquietante empate a cero, pero Gorka Iraizoz cometió penalti sobre Sesma en lo que terminó siendo el 1-0, previa transformación de Víctor (min. 39).
Una extraña "conjunción de planetas" deparó dos lesiones en un minuto, el 43, en el que tuvieron que ser sustituidos dos defensas centrales, uno en cada equipo. Así, mientras Ustaritz abandonaba el campo para dar entrada a Xavier Etxeita, García Calvo hacía lo propio para "canjear" su puesto a Iñaki Bea. La segunda parte comenzaba con la sensación de que el Valladolid tenía todas las de ganar pues el Athletic podía acusar el esfuerzo del miércoles en la Copa. Sin embargo, los "leones" quisieron demostrar que esta temporada no saben de cansancio o de atonía porque, de hecho, ya han remontado varios partidos.
Los de Caparros salieron a por el empate sin indicio alguno de claudicar. No obstante, fue Pedro León quien rondó el gol en un magistral lanzamiento de falta (min. 54). Cuatro minutos después, Víctor aprovechó un pase de Jonathan Sesma para marcar el segundo del Valladolid. Con el partido revolucionado, un extraño penalti de Nano dio la oportunidad de acortar distancias a Fernando Llorente, pero éste disparó al poste desde los once metros y fue Pablo Orbaiz quien convirtió el rechace en el 2-1. Con un Athletic muy ofensivo tras los cambios, pudo darse cualquier variación en el marcador, en un sentido u otro, pero las cosas se quedaron como estaban pese al admirable empuje rojiblanco.