Liga BBVA | Real Madrid - Racing
Juega Robben y Zigic amenaza el Bernabéu
Juande, seis victorias seguidas. Muñiz con Pereira y sin Munitis.
El Madrid todavía tiene pendiente un descorche. Suma seis victorias seguidas, pero le falta alegría y le sobra cálculo. El reproche sería una frivolidad en cualquier equipo del mundo, pero este no es un equipo cualquiera. El problema es que a Juande, además de triunfos, se le piden razones para creer. En la Champions, básicamente. Y se acerca la cita (faltan 18 días) sin que mejore el fútbol.
Frente al Racing está en la obligación de definir su estilo, agresivo o conservador, al ataque o a la contra, general o bandolero. Apuntalado el equipo, Juande debe mostrar otra carta. Habrá quien piense que la carta se llama Faubert, el extremo que reclamaba. Podría ser. Quizá el entrenador carecía de las piezas necesarias para expresarse. Su entrada en el equipo modifica el esquema y desconozco si el Madrid está preparado para reajustar el dibujo a estas alturas de la temporada. De momento, Faubert entró en la convocatoria y podría tener una oportunidad en el transcurso del partido.
La gripe de Robben ha eclipsado, no obstante, el debut del recién llegado. El genio holandés se entrenó ayer con el resto de la plantilla y hoy se espera que forme parte del once. El suspiro de alivio del madridismo militante, al confirmar que el muchacho ha abandonado la bata y las pantuflas, confirma que el equipo tiene una dependencia indisimulada de Robben.
Quien será baja es Gago, al que Apelación no ha retirado ninguna de las dos tarjetas que vio en Soria (Alves tuvo más suerte). Aunque su ausencia abría un abanico de opciones, algunas sugerentes (Ramos de pivote), será cubierta por Van der Vaart, lo que significa que se aplica el sistema oficial de turnos. El rendimiento es una incógnita. Rafael tiene gol (lo tuvo, al menos), pero le falta presencia en la medular.
Por arriba, Raúl proseguirá con la demolición de records históricos. Después de alcanzar los 307 goles de Di Stéfano, hoy igualará los 503 partidos del Nano Soler en Primera. Sólo le quedan por delante Sanchis (523), Buyo (542), Eusebio (543) y Zubizarreta (622). Y el Racing tampoco es ajeno a este aluvión de registros. El capitán le ha marcado 13 goles, lo que le convierte en una de sus víctimas favoritas en Liga, junto al Espanyol (15) y Valladolid (14).
El salvador.
Zigic dio el susto en el entrenamiento matinal al sufrir un pisotón en una uña maltrecha, pero está a salvo y hoy amenaza el Bernabéu. Su fichaje ha activado a un equipo que estaba incompleto. En cinco partidos ha marcado cuatro goles (tres a domicilio) y ha hecho crecer (y creer) a sus compañeros. No se recuerda un fichaje invernal más atinado.
No pretendo ser reiterativo, pero todo gira en torno a Zigic, un delantero infravalorado por la torpeza que se imagina en los jugadores que rondan los dos metros (2,02). Zigic es un recurso a favor y una pesadilla en contra. Esta noche no podrá repetir su sociedad con Munitis (hace dos años se asistieron en diez goles) porque el ex madridista está sancionado, pero es muy posible que encuentre en Pereira al socio ideal. El gallego, cedido por el Villarreal, se maneja como la Hormiga Atómica y resulta un tormento para las defensas.
Al ataque.
Mientras, el Racing no se esconde. Alineará arriba a Zigic y Tchité, y los acompañará de dos futbolistas ofensivos como Pereira y Serrano. Lo dijo Muñiz en el almuerzo que compartió con Juande a iniciativa de AS: "No firmo el empate". Debe ser verdad. El pupilo desafía al maestro.
Y ojo porque los números tampoco desprecian al Racing. Perdió contra Messi, pero antes acumulaba siete jornadas sin perder, con cuatro empates y tres victorias. En la primera vuelta el Madrid venció por 0-2, con goles de Rubén de la Red y Van Nistelrooy. Lo recuerdo para apuntar que aquel era otro mundo. Zigic vivía en Valencia, Juande en Londres y Faubert era un paseante totalmente anónimo.