Diamé: "Si el Rayo sube quiero quedarme aquí"

Hay muchas posibilidades de que me quede en el Rayo si ascendemos a Primera, pero aún no se sabe nada. Yo no quiero comprometerme con ningún club hasta que matemáticamente hayamos asegurado la permanencia. Y, luego, si subimos, quiero quedarme aquí". Estas palabras son de Diamé, centrocampista del Rayo y una de las sensaciones de esta temporada en Segunda, que ha tenido ofertas para haber dejado el club vallecano en el pasado mercado invernal y que continúa teniendo pretendientes para cuando finalice esta temporada.

El primer obstáculo que ha de solventar el Rayo para apuntalar sus aspiraciones de dar un nuevo salto de categoría pasan por vencer al Hércules el sábado (18:00 horas) en el estadio Teresa Rivero: "Ellos tienen un buen equipo, con gente a la que le gusta encarar la portería contraria. Lo demostraron en el partido de ida. Pero jugamos en Vallecas y nosotros podemos dar un golpe. Nuestro objetivo principal es asegurarnos la permanencia, aunque ¿quién no sueña con jugar en Primera la próxima temporada?".

El mediocentro celebra que el Rayo haya recuperado el instinto goleador en los últimos partidos: "Esto es fútbol. Sabíamos que el balón volvería a entrar en las porterías de los contrarios. Hemos ganado dos partidos fuera consecutivamente y ante equipos difíciles. Se ha recuperado una buena racha que nos viene bien. Ahora estamos arriba, a dos puntos de la zona de ascenso, pero de haber perdido ese par de encuentros nuestra situación se hubiese complicado. Ahora debemos aprovechar esa racha positiva y que jugamos en Vallecas para ganar el sábado al Hércules y dar otro golpe".

En Primera cuesta 12 millones

El Rayo fichó a Diamé con la carta de libertad. Aprovechó que en el Linares no había jugado los 25 partidos requeridos para su renovación y le hizo un contrato de aficionado. Luego, al poco de comenzar la campaña y viendo las prestaciones que ofrecía, que estaba despertando la apetencia de otros clubes y que uno extranjero podría llevárselo sin desembolsar ni un euro, le hizo un contrato profesional por tres años. En él incluyó que la cláusula de rescisión dependería de la categoría en la que se encontrase el Rayo. Si el equipo franjirrojo está en Segunda es de seis millones de euros. En primera pasa a doce.