"En nuestra cabeza está la remontada en la Liga"

Podía estar en su casa o en cualquier sitio, pero está aquí en la cárcel", subraya Teresa Mogín, directora de la Fundación Real Madrid, para explicar la importancia de la visita de Raúl al centro penitenciario de Navalcarnero. El capitán, que ejerce de embajador de la Fundación blanca, entregó los diplomas del curso de monitores desarrollado en esta cárcel y en su visita de más de hora y media tuvo tiempo para charlar de fútbol con los 150 internos presentes. "Raúl, eres el más grande. ¿Cuánto te queda en activo?", preguntaba un preso. "Espero jugar dos o tres años más en el Madrid", contestó. De inmediato, se arrancó en el graderío un grito unánime: "¡Raúl, Selección!".

Objetivos. Felicitaciones ("Baila flamenco cuando marques el gol 308", le decían) y autógrafos al margen (ningún recluso se quedó sin su rúbrica), Raúl inspiraba confianza con su sonrisa e ilusión con su discurso: "Se puede remontar la Liga porque otras veces hemos podido, pero si el Barça sigue así va a ser muy difícil. En nuestra cabeza está la Liga". Y le recordaron la frase de la semana de Heinze ("hay que romperse el ojete para remontar"): "Sí, claro. Hay que hacerle caso", dijo riendo. Otro interno le preguntó por la posibilidad de ver a Messi de blanco: "Lo veo complicado. Es el jugador más desequilibrante del mundo. Ojalá no estuviera tan bien".

¿Y el futuro de Raúl? "Entrenar es una posibilidad, pero la veo muy lejana", comentó. Y en la cárcel también quieren saber lo que otros muchos se preguntan fuera: ¿Saldrá otro Raúl? El siete les da aliento: "Llegué siendo un niño y me hice un hueco. Quien es bueno se hace un hueco para jugar. Vendrán más Casillas, Gutis y Raúles".