La Real no perdió en enero, como en el último ascenso

La siempre temida cuesta de enero no se nota en la Real. Al menos en lo que a resultados deportivos se refiere. Porque por primera vez en la última década ha conseguido cerrar el primer mes del año sin perder un partido, un dato a priori insignificante, pero que encierra una tremenda carga simbólica. No en vano, la última vez que la Real consiguió finalizar enero sin perder en Segunda, al final terminó subiendo. Fue en la temporada 1966-67, la del último ascenso. La Real de Lillo ya ha emulado en algo a la mítica de Puertollano.

El conjunto donostiarra ha jugado cinco partidos desde que se iniciara el 2009, con un resultado de tres empates y dos victorias, seis goles a favor y tres en contra. En la temporada 1966-67, los guarismos eran mejores: ganó los cuatro partidos de enero sin encajar ni un tanto y marcando nueve goles. Y al final ascendió para completar 40 años seguidos en Primera. El ejercicio pasado, los txuri-urdin también completaron un buen mes de enero, con dos victorias en Córdoba y contra Alavés, pero con dos derrotas en Castellón y Salamanca, y finalmente terminó en cuarta posición y se quedó a las puertas del ascenso.

La Real de Lillo ha enderezado el rumbo desde el 20 de diciembre, sin ninguna derrota y dejando su portería a cero en cuatro de los seis partidos que ha jugado, algo que le ha llevado a ser la Real menos goleada en Segunda a estas alturas (15). Por poner dos referencias: en la 66-67 había encajado 19 goles, y la pasada campaña 20.