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el tridente en brassa de mar habla el nuevo mandamás granota

"Luis García y Manolo Salvador son intocables"

El tridente en Brassa de Mar. José Antonio López Lara desvela cómo es el Levante que concibe él como cabeza visible del grupo que se ha hecho con las acciones. Su idea se basa en ascender, profesionalizar y hacer rentable el club.

Javier Mínguez
José Antonio López Lara
david gonzález

Directo y claro. Arisco y cercano. Visceral y llano. Utiliza la calle de en medio para expresar sus ideas. No tiene una doble cara. Depende de cómo le mires, puedes ver un cascarrabias o un señor amigable. Ése es José Antonio López Lara, 62 años, el "mandamás, jefe, portavoz o delegado del grupo inversor, aunque por ahora sin cargo", como él mismo dice. "Eso sí, soy del Levante y me comparo con el primero de los levantinistas", espeta de buenas a primeras. A su lado, Ana Serna, consejera, brazo derecho e hija del nuevo presidente, Jesús Serna, es la pulidora que lima las aristas con que se presenta en público el de Tomelloso. "No sé si el balón es cuadrado o redondo, he metido lo deportivo con calzador dentro de lo inmobiliario...". Ésa fue su presentación en sociedad el pasado 30 de diciembre. En el inmejorable entorno del restaurante Brassa de Mar, se hace entender mejor. Comenzando por cómo llegó al Levante. "Se presentaron en mi despacho Emiliano Carballo padre y dos abogados y me explicaron el proyecto. Han sido negociaciones muy duras. Un día antes de la venta, estuve a punto de decirle a los vendedores: ahí os quedáis", manifestó el empresario.

Precisamente la figura de Carballo, junto al hermetismo de la venta y la posterior actuación de los nuevos dueños, es lo que hace que mucha gente vea la sombra de Pedro Villarroel. José Antonio habla claro sobre cuál fue el papel del ex presidente del Toledo y cuál será en el futuro, sobre todo en lo deportivo. "Él tenía una autorización firmada por Villarroel, que aquí ya no pinta nada, para vender el club. Si no llega a ser por él, la operación se habría roto", señaló. "Otra cosa es el poder que pueda tener Carballo en lo deportivo: ninguno, que quede claro. Tenemos a dos señores que, con pocos medios, han hecho un equipo que está cumpliendo con creces. Aquí no va a meter la mano nadie", indicaba en referencia al buen papel realizado por Luis García Plaza y Manolo Salvador. En cuanto a Carballo Díaz, actual director general, aseguró que no está pagando ningún precio por la intermediación de su padre. "Me han enseñado en esta vida a ser agradecido. Ahora espero resultados. Voy tomando nota de todos", indicó.

Y es que, lejos de la figura autoritaria que exhibe, López Lara asegura que no le duelen prendas en aceptar ideas y en dar confianza a la gente en su proyecto. "Me gusta delegar. Si no, ¡cómo voy a pedir responsabilidades!", expresó. "Miren, el otro día, en el primer Consejo, dije: señores, aquí hay que traer ideas y hay que conseguir dinero. Lo que no consiento en mi proyecto es que me digan: esto está mal. Vale, ¿pero qué solución me traen? No me duelen prendas en aceptar consejos pero, en este club, desde hace mucho tiempo todo el mundo dice y dice y nadie hace", subrayó.

Volviendo al entrenador y al secretario técnico, lanzó otro mensaje bastante clarificador. "Luis García y Manolo Salvador son intocables. Son las dos personas que mandan y van a mandar de los señores que están jugando al fútbol. Ahora mismo el equipo es lo mejor que tenemos, ¿por qué lo vamos a cambiar? Yo me rijo por criterios empresariales", continuó. López Lara desveló que ya está empezando a planificar con sus dos 'jefes' de lo deportivo el futuro. "Les pregunté cuánto dinero hace falta para subir a un equipo a Primera. Su respuesta fue 12 ó 14 millones y, bien administrados, incluso menos. Luego es cuando yo voy a Madrid y el grupo lo estudia y lo aprueba en su caso", desveló.

A Primera.

Y es que, hablando de lo deportivo, el abogado quiso rectificar respecto a lo que dijo en su 'presentación' sobre que lo había metido "con calzador" en lo inmobiliario. "Para mí, en este momento, lo más importante es el equipo. Si ellos no vencen en el campo, no se puede ganar dinero. No me expliqué bien el primer día y me ha pasado factura, pero soy impulsivo y directo y todo fue confusión ese día. Aseguro que lo más importante es el plano deportivo, estar en Primera, sólo así el Levante es viable y con unos 15.000 socios. Ése es nuestro objetivo, el éxito deportivo que arrastre a la gente y a todo lo demás", explicó un López Lara que reiteró que quiere a los granotas en Primera. "Yo no les pedí a García Plaza y a Salvador que subiesen el próximo año, pero sí que es nuestra meta primordial estar en Primera División, en dos o tres", continuó el representante de los inversores, al que, si por él fuera, le gustaría premiar el esfuerzo de los futbolistas. "Hace tiempo que tendría que haber venido aquí con un sobre para ellos, es una obligación moral. Pero aquí se le debe dinero a mucha gente y es como lo de hacer fichajes: yo no puedo ir haciendo ostentación, aunque el dinero sea de los dueños".

Regresando al presupuesto, López Lara adelantó que quiere aplicar criterios empresariales al Levante. "No entiendo cómo clubes que ingresan 10, gasten 20. Esto es una caja en la que debes coger lo que tienes. Un presupuesto de ocho millones, como el que tenemos, se maneja con dos bolígrafos, un papel y una mesa", manifestó. Otra cosa que no entiende es cómo se distribuyen los gastos en la entidad de Orriols. "No me cabe en la cabeza que los futbolistas, unos señores que tienen al Levante arriba, se lleven 3,5 millones y que el resto de gente ganen los otros 4,5. Hay sueldos muy elevados que ni sé a quién corresponden, pero estoy en ello y se va a acabar. Vamos a profesionalizar el club", desveló.

A estas alturas de la conversación, queda claro que lo deportivo sí que le obsesiona. Para muestra, su preocupación por las malas o nulas relaciones con otros clubes, sobre todo los vecinos. "Lo de no hablarse con el Valencia me parece increíble. He tocado a las puertas de Mestalla y me las han abierto. Me reuní con ellos (el miércoles por la mañana) y les dije que todo lo que necesitaran del Levante lo iban a tener. Y en los próximos días pienso verme con Llaneza, del Villarreal", añadió. Precisamente, de sus buenas relaciones con la entidad ché sale una de las ideas que barrunta. "Alguien me habló durante ese partido de Copa de la posibilidad de jugar en el mismo estadio, lo tengo en la cabeza y me parece coherente, pero lo veo complicado", aseguró.

Con quien también quiere mejorar las relaciones es con el Ayuntamiento. "Me he reunido varias veces con Cristóbal Grau y me parece una buena persona. Vamos a intentar arreglar el asunto de los cuatro millones más intereses porque lo que le hicieron al Consistorio es una mala jugada", indicó. Por cierto, de lo que no piensa hacerse cargo el propietario es de los 3,5 millones que se le debe a los ex futbolistas. "Eso está fuera de la masa concursal. Lo van a tener que pagar otros, igual que si sale algún pufo. Nosotros, desde luego, no", subrayó. Volviendo a su relación con las instituciones, explicó por encima cuál es su proyecto inmobiliario. "El Ayuntamiento cree que lo que hay en el camino de las Moreras es un buen terreno y yo pienso lo mismo. Allí tenemos que construir un estadio funcional, que es lo que le falta a Valencia, para unas 20.000 personas", manifestó. Pero, para ello, ¿habrá que vender primero los terrenos donde se alza el Ciutat? "Todo el mundo se cree que la recalificación es la panacea. Y cuando se produzca, ¿qué? Porque yo vivo en el mismo país que el resto y aquí ni se vende ni se compra, no hay un precio referencial. Aquí lo que hay que hacer es traer dinero", adelantó.

Por otro lado, también espera resolver el problema de la Ciudad Deportiva. "Eso es un desastre. Yo tengo claro que, en mi empresa, lo que no es rentable hay que hacerlo rentable o se cierra esa paraeta", aseguró. Ahora, se ha expresado mejor. Habrá que esperar a los hechos.