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Real Madrid | El técnico azulgrana elogia al capitán blanco

Guardiola: "Habrá un antes y un después cuando se retire Raúl"

El '7' representa como nadie la filosofía del técnico

Tomás Guasch
Actualizado a
Guardiola y Raúl, ante Austria.
fontcuberta

La simpatía es común. Y el aprecio. Y la admiración. ¿Sabían que la semana del último Barça-Madrid, el que según ciertos pronósticos el Madrid iba a perder goleadísimo, Raúl y Guardiola se hablaron? Pues ya lo saben. El entrenador culé le hizo saber al capitán 'merengue' que una cosa es lo que dice la Prensa y otra lo que piensa su vestuario.

Pep insistió los días antes del clásico en el "máximo respeto" que su equipo tenía, y tiene, hacia el Madrid. A Raúl se lo dijo personalmente. Sin darle publicidad. Como le gusta hacer a él las cosas. Y es que su filosofía es Raúl en su estado químicamente puro: más allá del resultado está la entrega, la dedicación, el respeto fanático al escudo. El jugador ideal para Guardiola es Raúl y si no lo expresa en público es que, incluso para él, sería muy fuerte poner a la bandera del Madrid como ejemplo.

Admiración mutua.

Raúl no se queda atrás cuando habla de Guardiola. En la entrevista que el siete concedió hace unos días a Tomás Roncero explicó que considera a su ex compañero de Selección como el mejor fichaje del Barça y el responsable de haber recuperado a jugadores que el año pasado estuvieron lejos de su mejor versión. Raúl y Guardiola son dos locos del fútbol. No extraña pues que se echen flores mutuamente. Lo único que no podrán ya es defender la misma bandera, pero defenderán siempre la misma idea: el fútbol honesto, el de verdad. El que vivirá "un antes y un después cuando Raúl se vaya". Lo dijo ayer Guardiola

Su amistad se forjó en La Roja

La amistad entre Raúl y Guardiola viene de lejos. El gran vínculo entre ellos se forjó defendiendo la camiseta de la Selección, como muestra la imagen de la izquierda. La fotografía es del España-Austria del 27 de marzo de 1999. Aquel choque era valedero para la Eurocopa de 2000 y los de Camacho golearon 9-0, con cuatro tantos de Raúl. Tras el partido, Guardiola se quitó el sombrero ante el madridista: "Este chico tiene algo especial, es un superclase...". La admiración perdura diez años después.