Mido hace olvidar a Valencia y aleja del liderato al Liverpool

El 2009 sigue sin ser el año del Liverpool, que todavía no conoce la victoria después de cosechar ayer en Wigan el tercer empate consecutivo en la Premier durante este mes (los dos anteriores fueron ante el modesto Stoke y frente al rival de la ciudad, el Everton). Los reds ocupan la tercera plaza, a dos puntos del Manchester United y con un partido más. Rafa Benítez salió ante el séptimo clasificado con un solo punta, Fernando Torres, que no marca en Liga desde el pasado 5 de octubre contra el Manchester City, y prefirió dejar a Kuyt y Keane en el banquillo. El Wigan salió sin su mejor futbolista, el ecuatoriano Valencia, que prefirió no arriesgar y no jugó por unas molestias en la parte posterior del cuádriceps, ni con Heskey, que fichó por el Aston Villa el pasado lunes.

El egipcio Mido, el recambio de Heskey y la futura estrella de este equipo en caso de que Valencia se marche al Real Madrid, debutó con la camiseta del Wigan marcando un tanto de penalti. Ese gol amargó la noche a los reds. Fue en el minuto 83, pero se veía venir tras el descanso. Durante la primera mitad, las mejores ocasiones fueron para los visitantes e, incluso, Torres mandó un esférico al palo a pase de Gerrard. Benayoun apareció en el minuto 41 para recoger un pase de Mascherano en el interior del área y marcar sin apenas ángulo, gracias a que el guardameta Pollitt estaba fuera de su portería. Pero los de Steve Bruce se transformaron en la segunda mitad y ahogaron a un Liverpool que no reaccionó. Incluso, Rafa Benítez tuvo que dar las gracias y pedir la hora porque Rodallega estrelló un balón al travesaño de Pepe Reina en el minuto 91.