"Ya no defiendo ni a los medios ni al entrenador"

Donde dije digo, digo Diego. En plena semana clave para el Sevilla, cuando el equipo necesita una mayor concentración y unión en el vestuario, Enzo Maresca ha abierto la caja de Pandora. "Igual que en su momento defendí a los mediocentros y al entrenador, a día de hoy no puedo defenderlos. No estamos haciendo buen juego y no estamos bien", sentenció sin tapujos el italiano cuando se le cuestionó por la demarcación que ocupa y que está siendo el objetivo principal de las críticas esta temporada.

El transalpino, en cambio, cree que "hay solución e intentaremos buscarla el jueves" y ofrece su porqué a la ineficacia de la medular: "Este equipo no ha tenido ningún mediocentro de construcción en los últimos años porque estaba Daniel Alves. Ahora se te pide construir y yo lo estoy intentando, pero si fallo dos veces, hay una crítica grande. Más que a otros. Eso quiere decir que la gente espera mucho de mí".

Como capitán del equipo y peso pesado del vestuario, analiza los principales defectos de los que adolece el equipo: "Nos preocupamos demasiado de los rivales. Hay que tener respeto por los otros equipos, pero son ellos los que tienen que tener cuidado con nosotros. Eso es un fallo. Cuando planteas los partidos así y sale mal, se convierte en un problema".

Tras la derrota ante el Racing del pasado domingo, Manolo Jiménez comentó que Maresca "está atravesando por un bache y tenemos que intentar recuperarlo". El italiano, en cambio, no está de acuerdo con la apreciación de su entrenador: "No estoy en ningún bajón. Estoy recuperado y bien, pero llevo mucho tiempo sin continuidad y cuando te falta ritmo no estás al cien por cien. Jugué los 90 minutos de Mestalla, pero no jugaba un partido completo desde Getafe, y han pasado dos meses. Con minutos iré a más".

No obstante, reconoce que se encuentra muy bien en el Sevilla y descarta una posible marcha, como se ha apuntado desde Italia, porque "acabo de renovar y estoy centrado en el equipo". Descarta que el equipo haya dado un paso atrás pero entiende que "la gente quiera pasarlo bien".