Copa del Rey | Espanyol 0 - Barcelona 0
Pochettino mereció algo más
Un mejorado Espanyol trata de tú a la versión del Barcelona más gris de esta temporada
El corazón y el acicate del nuevo entrenador le dieron aire al Espanyol en su envite copero con el Barça, en partido de poco fútbol. El interés perico le valió para aplazar una semana la decisión de la eliminatoria. El por muchos anunciado paseo azulgrana no se produjo. Es más: si alguien mereció ganar, siempre por la mínima, fueron los periquitos, sobre todo en la primera parte. Llegaron más hasta Pinto (Luis García, Valdo, Callejón...) que sus rivales ante Kameni. El Barça tiró por primera vez a puerta (Iniesta) a los 32 minutos. Fue su versión más gris del año.
Y sí: el equipo de Guardiola pasó con absoluta discreción por Montjuïc, más atento a no perder que a ir por el partido. Dio por bueno el 0-0, pero ahora cualquier empate a goles en el Camp Nou clasificaría a los de Pochettino. Igual estamos a ocho días del gran zambombazo. ¿Una utopía? Probablemente. De momento, el Espanyol consiguió dejar al Barça a cero (no pasaba desde el primer partido de Liga, 1-0 en Soria) y rompió su racha de trece triunfos fuera de casa, ocho en Liga, dos en Copa y tres en Champions.
Más corto.
Todo eso pasó porque el Espanyol fue otro (si hubiese jugado con ese interés tendría en Liga más de 15 puntos) y porque sin Messi, Alves y Xavi el Barça es otro, más cortito y previsible. La rápida lesión de Márquez le dejó además sin un jugador capaz de sacar la pelota desde atrás. Con Iniesta volcado a la izquierda, no hubo magia en el centro del campo azulgrana. Sólo pelea, que el rival anuló y hasta superó mientras tuvo fuerzas. Le faltó el gol a los blanquiazules, pecado mortal este año, y cuando entró Messi era tarde. Pochettino debutó con buen pie para su afición, que despidió al equipo con una gran ovación y una certeza: su reto está en la Liga y el gustazo en el Camp Nou es posible.
El detalle: lesión muscular de márquez
Rafael Márquez sólo aguantó diez minutos sobre el terreno de juego. El mexicano ha vuelto a lesionarse. Esta vez se trata de una rotura fibrilar en un gemelo. Hoy será sometido a diversas pruebas médicas, que determinarán cuánto tiempo tendrá que estar de baja.