Berlusconi: "Kaká se queda en el Milán"

"Kaká se queda en el Milán. Para él, el dinero no lo es todo", ha anunciado esta noche Silvio Berlusconi, primer ministro de Italia y presidente del club rossonero. Unas declaraciones definitivas aunque sorprendentes, porque horas antes había afirmado todo lo contrario al diario 'La Stampa'.

"Tendré que vender a Kaká", había argumentado Il Cavaliere: "Tengo que venderle. El City le ha hecho una gran oferta, 15 millones de euros libres de impuestos por temporada. Si no le vendo, el equilibrio del equipo se puede romper. Y me arriesgo a perder a Kaká sin ganar nada por él. Claro que tengo que considerar lo que dicen los fans, poner muchas cosas en la balanza... Ya veremos". Hace dos días, Silvio ya reconocía que, dadas las circunstancias, era muy difícil que el futbolista brasileño permaneciera en San Siro. Ayer dio un giro inesperado a la situación, quizá forzado por los hinchas milanistas, algunos de los cuales se concentraron en la puerta de la casa del jugador, al que obligaron a saludar, con una camiseta del equipo en la mano, desde el balcón.

Poco antes del anuncio final de Berlusconi de que no venderá a Kaká, se daba casi por cerrado el acuerdo entre el Milán y el Manchester City, a falta de la firma del jugador. En principio, el club inglés estaba dispuesto pagar algo menos de 130 millones de euros. La operación ya sólo parecía estar pendiente de una reunión del jugador y de su padre, que también es su agente, Bosco Leite, con los dirigentes del City, en la que se establecería el salario del crack (se maneja una cifra de entre 18 y 20 millones de euros por temporada) y la cláusula de rescisión en caso de que se incumplieran las condiciones que había exigido el propio Kaká.