El equipo de Goran Milojevic se atasca en el Romano

El Mérida dilapida sus opciones en el Romano. El empate sumado ante el Lanzarote supuso un nuevo paso atrás en sus aspiraciones de acceder a la cuarta plaza. De esta forma, el equipo extremeño, que comenzó con dudas la temporada pero que luego pareció enderezar su trayectoria, transita otra vez por un camino de dudas que pueden dejarle fuera de alcanzar su objetivo de poder disputar la promoción de ascenso.

Lo acontecido el pasado domingo es una historia ya conocida por los aficionados del equipo pecholata. Sucedió también ante el Atlético Ciudad (0-0) y ante el Atlético de Madrid B (1-1) en los dos partidos anteriores, dejando escapar seis puntos que habrían resultado determinantes para impulsar al equipo dirigido por Goran Milojevic.

De nada sirvió que el Mérida marcase pronto ante el Lanzarote, con gol del uruguayo Fernando Magallanes, porque después no supo matar el partido ante un adversario que perdió el respeto a los emeritenses y que pudo llevarse el partido.

El Mérida se atasca en casa y pese a que en sus desplazamientos rinde con más eficacia, el lastre casero hace casi inservibles sus buenos resultados a domicilio, como las victorias en los campos del Leganés y Las Palmas Atlético y el empate en Cartagena.

El Mérida sigue teniendo problemas de definición y de hecho es uno de los equipos menos realizadores del grupo. Con un promedio inferior al gol por partido, no está a la altura de los mejores. Y aunque la distancia con la cuarta plaza es de sólo cinco puntos, su juego y prestaciones parecen estar más lejos.