El Huesca espera iniciar el 2009 con una victoria

Se acabó lo bueno para afrontar lo mejor. Tras una semana de asueto para desconectar del fútbol y retornar a las raíces, la plantilla de la SD Huesca volvió a citarse en un tétrico Alcoraz para dirigirse, con cambio de última hora (sigue el Via Crucis), a las instalaciones de la Ciudad Deportiva Municipal. Condiciones de trabajo aparte, Calderón y los suyos ya han cargado pilas para afrontar una segunda parte del campeonato realmente apasionante, donde hay que consolidar el excelente anticipo acumulado en forma de 24 'puntazos' y que requiere de mucha concentración y esfuerzo para que los azulgrana puedan cumplir con el objetivo cuanto antes.

Todos están en condiciones, todos salvo Rubén. El rápido cambio de clima Las Palmas-Huesca ha provocado un proceso gripal que mantiene al isletero en cama, con los técnicos a la expectativa en cuanto a su recuperación. Pendiente de su evolución, Nico Medina podría entrar en el once, donde también hay que despejar dudas en defensa, pues Robert y Corona piden paso a gritos, aunque Jaume en el lateral y Paco y Rigo como centrales han rendido a buen nivel. El entrenador tendrá que tomar otra vez aspirinas ya que se avecinan dolores de cabeza para configurar el once y algún catarro por las bajas temperaturas.

A todo esto, el Alavés no caminará solo en El Alcoraz. El relevo técnico ha dado nuevos bríos y esperanzas a una afición que sabe que tendrá que volver a pelear por la permanencia un año más. La puñalada ha sido grande con la venta de Toni Moral, rápidamente sustituido por el sportinguista De Lucas, pero el club vitoriano, en Segunda por culpa de un gol de Corominas cuando el Espanyol estaba descendido el verano de 2006, mira al frente y llega al Alcoraz con muchas ganas de conseguir tres puntos vitales que acorten distancias con el pelotón de la 'clase media'. Tres puntos trascendentes, aunque no definitivos.