Granero: "Vuelvo más por el corazón que por la cabeza"

José Carlos Granero regresa al Alicante para empezar una nueva era al frente del banquillo celeste. El navío alicantinista está muy dañado y el presidente entiende que el único que puede sacar al equipo a flote es el entrenador que consiguió el ascenso. Su destitución en la séptima jornada de Liga de esta temporada no ha impedido que el valenciano muestre el cariño que le une al Alicante y vuelva para intentar salvar al equipo que tanto estima. "Es una decisión que tomo más con el corazón que con la cabeza", reconoció el técnico.

El entrenador valenciano señaló ayer en su presentación como nuevo entrenador del Alicante que tomó la decisión porque es "lo que me pedía el cuerpo". "Éste para mí no es un club más. He estado tres temporadas aquí y he conseguido algo importante. Lo más fácil habría sido mirar hacia otro lado. He tomado la decisión desde mi consciencia y con todas las consecuencias", admitió Granero.

El de Casinos dejó al equipo a un punto de la permanencia y diez jornadas después se encuentra a once puntos de esa ansiada salvación, una situación que no es irreversible para el técnico. "La situación es difícil y más pesimista que optimista, pero estoy plenamente convencido de revertir esta situación", dijo. Además, el técnico reconoció que le "sorprendió" el ofrecimiento del club y se mostró "agradecido" porque volvieran a confiar en él.

"Esta situación es difícil pero no irreversible"

Los jugadores son los que se están viendo más afectados por las idas y venidas de nuevos técnicos. La plantilla ha visto pasar cuatro entrenadores diferentes en 17 jornadas y ahora ven cómo regresa el técnico con el que empezaron esta larga temporada. José Carlos Granero es consciente de la situación que está pasando el vestuario y sólo quiere que vuelva la normalidad. "Los jugadores quieren atender a algo normal, a algo lógico", explicó el técnico, que sabe cómo tratar a sus jugadores. "Yo soy muy frío, muy duro, y les digo las cosas cara a cara, porque ellos necesitan que les digan las cosas claras", indicó. Granero confía en devolver esa tranquilidad y esa normalidad que tanto necesita la plantilla, de la que espera que siga trabajando igual que cuando dejó el equipo hace dos meses y medio. "Cuando me marché deje un grupo de jugadores muy humilde y muy trabajador y a pesar de que la situación es difícil, no es irreversible", declaró el nuevo entrenador del Alicante.