El Decano sabe moverse bien en la zona de peligro

"Vamos a sufrir como perros". La premonición de Lucas Alcaraz no es baladí. El Recre, salvo giro inesperado en la segunda vuelta, volverá a sufrir lo indecible para consumar la permanencia. Una experiencia que, por angustiosa, no es desconocida en Huelva. Salvo en la temporada a las órdenes de Marcelino, la militancia del Decano en Primera está marcada por la agonía.

De hecho, el conjunto albiazul se ha acostumbrado a convivir con la zona de descenso, un hándicap para muchos equipos poco habituados al sufrimiento, pero una ventaja para el que, como el Recre, ha sabido adaptarse para sobrevivir. Así lo corroboran los números en 2008, año en el que ocupó plaza de descenso en 18 de las 37 jornadas disputadas, 21 correspondientes a la pasada temporada y 16 a ésta, en las que los puestos decimoséptimo (9 ocasiones) y decimoctavo (11 ocasiones) fueron los que más veces ocupó.

Bajo las órdenes aún de Víctor Muñoz, el equipo mantuvo una distancia prudencial con el umbral del descenso precisamente hasta que entró en 2008, momento a partir del cual inició una peligrosa curva descendente de resultados que lo hundió en la penúltima posición y que acabaría costando el puesto al técnico maño.

Su sustituto, Manolo Zambrano, rescató inicialmente al Decano, que llegó a situarse decimoquinto, y aunque luego alternó jornadas dentro y fuera de la zona de peligro, finalmente consiguió dejar al equipo en Primera. Ya en el presente ejercicio, el Recre se estrenó con un triunfo en Heliópolis que le brindó la mejor posición de 2008 (8º), aunque fue retrocediendo hasta acomodarse en su hábitat natural: el sufrimiento.

Números. Tras caer en la sexta jornada en descenso, el club optó por sustituir a Zambrano por Lucas Alcaraz, con el que el conjunto albiazul suma nueve jornadas en descenso y sólo ha estado en una fuera, curiosamente tras perder en Nervión. Una situación en la que sabe manejarse muy bien el preparador granadino durante sus dos etapas al frente del Decano. No en vano, de las 48 jornadas en que Alcaraz ha dirigido al Recre en Primera, la mitad (24) las ha vivido como colista y sólo en cuatro de ellas ha estado fuera del peligro.