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Liga Adelante | Hércules

El club se rinde: Sergio y Tote no jugarán mañana

Apelación desestimó los recursos y no pedirá las cautelares

<b>BUSCA ALTERNATIVAS. </b>Mandiá, ayer, durante el entrenamiento en el estadio de atletismo.
FITO GONZÁLEZ

Una vez se pasó el efecto gaseoso tras comprobar cómo Tote no pisó a Manolo Martínez y fue sancionado con un partido, el club ha preferido meditar fríamente la situación y no pedirá la suspensión cautelar de la sanción del madrileño ni tampoco la de Sergio Fernández. En un principio, el Hércules había anunciado que su postura iba a basarse en la defensa, hasta las últimas consecuencias, de los dos jugadores expulsados en Tenerife.

Sin embargo, ayer, tras recibir la desestimación de los recursos por parte de Apelación, la comisión deportiva decidió no seguir adelante y no presentar alegación ni petición de las suspensiones cautelares de las sanciones al Comité de Disciplina Deportiva, última instancia deportiva. La comisión ha preferido que descansen en este partido contra el Huesca y que estén disponibles en los dos primeros partidos del año ante el Celta, en Balaídos, y en el derbi contra el Alicante.

Previsión.

Por tanto, Mandiá no podrá contar con Tote ni Sergio Fernández para el importante encuentro de mañana ante el Huesca, algo que no pillará por sorpresa al técnico, según confesó ayer. "Nosotros estamos trabajando toda la semana como si no fueran a jugar. Si luego hay alguna sorpresa, mejor para nosotros", comentó el técnico antes de saber la decisión de Apelación. Por Sergio jugará César y por Tote duda entre Sendoa, Morán y Taborda.

"No se puede sancionar por algo inexistente"

Juan Carlos Mandiá tampoco eludió ayer hablar de los árbitros y de la jugada en la que Tote fue expulsado por un supuesto pisotón a Manolo Martínez. "En las imágenes se ve clarísimamente que no le pisa. Uno puede expulsar, uno puede sancionar, pero lo que no se puede es ponerle un partido de sanción por un pisotón que no existe", comentó el técnico. También habló del criterio de los comités. "Tenemos que tener cierta tranquilidad con los árbitros porque es muy difícil arbitrar, pero también creo que cuando algo está mal hay que actuar, decir que se ha equivocado, que la expulsión está mal hecha y que no se le puede poner ningún partido", dijo. "Los árbitros no son malísimos, pero tampoco son perfectos y no pasa nada por decirles que se han equivocado en una decisión", añadió.