El Getafe hunde al Mallorca y se aproxima a Europa

El Getafe, que por cuarto partido consecutivo consigue puntuar y se aproxima a los puestos europeos, logró una goleada solvente ante el Mallorca, que acaba la jornada hundido en los puestos de descenso.

Ambos contendientes saltaron al terreno de juego con diferentes sensaciones. Los madrileños, con los deberes hechos tras superar con buena nota la serie de encuentros ante los mejores de la Liga. Dos empates, ante Villarreal y Barcelona, y una victoria ante el Real Madrid, eran argumentos suficientes para asustar al club bermellón.

Mientras, los hombres de Gregorio Manzano aterrizaron en el Coliseum con una crisis institucional en la que su presidente-propietario ya prepara su retirada del club. Además, la situación deportiva de los baleares no ayuda tras sumar 2 de los últimos 18 puntos en juego.

Con esos argumentos, todas las papeletas parecían llevar premio para el Getafe, que, sin embargo, salió dormido en los primeros compases del duelo. Sin Javier Casquero (sancionado) y sin su sustituto natural, Fabio Celestini (lesionado), el centro del campo getafense tardó en carburar.

Fruto de las dudas iniciales del Getafe, el Mallorca pudo inaugurar el marcador con un disparo a bocajarro de Aduriz (minuto 2) que paró Abbondanzieri con muchos problemas. El argentino, por un momento, recordó al de hace dos temporadas, cuando se alzó con el trofeo de guardameta menos goleado de la Liga.

Aduriz falló su ocasión y desperdició la oportunidad de poner por delante a los suyos. Pero quien no desaprovechó su turno fue Cosmin Contra, que, poco después, cuando su equipo estaba totalmente dormido, marcó el 1-0 gracias un penalti inexistente sobre Ikechukwu Uche. El delantero local hizo "picar" a Paradas Romero, que señaló la pena máxima cuando el nigeriano se tiró dentro del área tras una salida de Germán Lux.

El tanto del rumano espoleó al conjunto local, que durante quince minutos volvió a mostrar el buen fútbol de la temporada pasada, ausente en los últimos tiempos en el Coliseum. Fueron los dos medios centros, Granero y Polanski, quienes llevaron el peso del Getafe durante ese tramo del choque. Precisamente, fue el alemán quien dio un pase en profundidad a Uche para que éste anotase el segundo de la tarde con una vaselina perfecta sobre Germán Lux.

Pero el Getafe no está acostumbrado a ganar con tranquilidad. Parece que le gusta sufrir. Para no variar, se echaron atrás y el Mallorca aprovechó un despiste para reducir distancias por medio de Aduriz. No hubo más en el primer acto. Sólo la expulsión de Raúl Longhi, ayudante de Víctor Muñoz, que se quejó airadamente de una posible mano de Varela previa al tanto bermellón.

En la reanudación, el técnico del Getafe tuvo que cambiar a Juan Albín por Manu del Moral. El uruguayo, lesionado, tuvo que abandonar el partido y dar paso al ariete jienense. Precisamente, éste pudo marcar el tercero a los quince minutos de la segunda parte, pero no estuvo afortunado en el último control cuando estaba delante del portero.

Cuando el partido había caído en la modorra y en el aburrimiento, apareció de nuevo Manu, esta vez para no fallar y marcar el tanto de la sentencia, que fue la puntilla para el Mallorca. El conjunto balear nunca pudo con los madrileños y no tuvo más remedio que ser un espectador del cuarto tanto de Jaime Gavilán, que hunde a los bermellones en el pozo de la clasificación. El Getafe, por fin, parece que ha logrado arrancar. Ya acecha a los puestos europeos.