"Estando cada uno en su lugar no vamos a sufrir"

Han pasado dos días del partido en Sevilla, ¿le duele algún músculo? ¿Tiene o siente molestias?

No, todo está perfecto.

Un empate, tal y como estaban las cosas, es un buen resultado.

Sí, pero tenemos que ser ambiciosos y no quedarnos sólo con eso.

A nivel personal, ¿qué valoración hace?

Feliz de poder ayudar al equipo. Siempre he estado con la motivación suficiente como para poder competir al máximo nivel.

¿Nota diferencias entre Mané y Bartolomé Márquez?

Llevamos muy poco tiempo.

Cierto, pero usted, que también es entrenador, algo debe haber notado.

Cada uno ve las cosas de manera diferente y tiene su criterio.

Fue muy diplomático. Le daremos una vuelta más a la pregunta, ¿todo lo que sucedió fue mala suerte?

En algunos momentos, sí. En situaciones complicadas y delicadas, uno debe valorar todo lo que le rodea, por qué sucede, qué puede influir y cómo se puede cambiar.

¿Y cuando está localizado el foco del problema?

Ir un poco más allá y no agarrarse a ello como excusa; eso no sirve. En un momento puedes valorar que algo no ha funcionado por mala suerte, pero si caminas siempre en la misma dirección, al final debes ver que hay alguna cosa que no se ha hecho muy bien.

¿Qué vibraciones tiene con el nuevo entrenador?

Muy buenas, aunque entre todos debemos ser inteligentes y seguir con la actitud del pasado domingo; esa es la fórmula para que todos salgamos ganando.

Como ante el Betis.

Tiene una de las mejores plantillas del campeonato. Juega de manera ofensiva, directa, vertical... Por eso mismo, sumar un empate igualando el marcador una vez se adelantaron ellos, tenemos que valorarlo como tal.

Y ahora a Valencia.

Partidazo. A uno siempre le queda en el corazón lo que conseguí en Mestalla, pero después de dos años y medio por Barcelona, mi cabeza no me pide otra cosa que los tres puntos.

¿Puede abstraerse de todos los recuerdos?

Ahora sólo caben cosas del Espanyol y me apetece seguir pensando en competir para ganar.

Muchos de sus compañeros hablan de falta de confianza, tras ver muchos partidos desde el banquillo o la grada. ¿Es su caso?

Mire, cuando más inactividad tiene un profesional, más riesgo de lesiones. Si a eso le unes que no acaban de contar contigo, los problemas van en aumento.

¿La manera de solucionarlo?

Compitiendo.

¿Y si no te dejan?

Luchando por ello.

¿Mantiene relación con la gente de Mestalla?

Sí. Con Carlos Marchena hablamos a menudo, al igual que con otros compañeros o empleados del club. Pero con él la relación es especial.

¿Y cómo ve el partido?

Con posibilidades de ganar, ¿por qué no? Lo pudimos conseguir en Sevilla y debemos repetir en Valencia.

¿Qué le dicen de Unai Emery?

Me hablan muy bien de él.

¿Quién?

Gente. ¿Sabe que compartimos vestuario en el Toledo?

¿No me diga?

Y él es el joven...

Ya entiendo lo que me quiere decir.

Es un técnico fresco, que sabe lo que quiere. Tiene un modelo fresco y dinámico, moderno, para que me entienda.

¿Cómo era Unai como jugador?

Técnicamente muy bueno. Él era mayor que yo y estaba callado entonces en el vestuario. Sólo me fijaba para aprender. Pero siempre me quedé con la idea de que era una buena persona con los compañeros.

Dicen por Almería que no contaba mucho con los jóvenes de la cantera.

Eso es criterio personal, pero deje que le rebata: la semana pasada, en UEFA, hizo debutar a un chico y en el Camp Nou, a otro.

¿Se imagina celebrando la victoria en Valencia como lo hicieron el domingo pasado cuando Ferran Corominas hizo el gol del empate?

¿Por qué no? El nuevo técnico y sus ayudantes se han implicado en el vestuario; están esforzándose para hacer un gran grupo.

¿Quiere renovar?

Me encantaría seguir aquí.

Acaba contrato el próximo 30 de junio y por ley podría negociar con cualquier equipo el día 1 de enero.

Mi idea es continuar en Barcelona; lo que pase, ya se verá. Me siento tan vivo o más que cuando llegué hace dos veranos. Cuando uno llega y se aclimata bien a una ciudad, lo más gratificante es estar listo cuando se te necesita. Y ahora más que nunca quiero estar presente.

Muchos aficionados ya están sufriendo.

Pues que se calmen.

¿Hay mensaje positivo?

Usted sabe cómo pienso.

¿El objetivo son los 42 puntos?

Poco a poco. Ahora, salir de abajo; luego, ya se verá.

¿Entiende a los que padecen?

Estando cada uno en su lugar, no vamos a sufrir nada.

Es decir, que cada uno se dedique a lo suyo, sin querer interferir en otras labores.

Mire, lo más importante de todo es que la afición se sienta orgullosa del equipo y eso sólo depende de nosotros.

Teniendo en cuenta que ellos son fieles, ¿la responsabilidad es mayor?

No lo dude.

¿Piensa en el estadio?

Entiendo que para los hinchas sea lo más grande; para el grupo, eso ahora debe pasar a un segundo plano.