Mané contra Chaparro

Mané, un entrenador de reconocido prestigio y fortísimo carácter, es el elegido para reconducir la nave de un Espanyol en picado y a un sólo punto del descenso. El Betis atesora más fútbol que resultados, pero por lo menos está mucho mejor clasificado que en las tres temporadas preferentes. Ahora bien. La estadística es la estadística. Los españolistas sólo han perdido ¡uno de sus últimos 12 partidos en Heliópolis! Y eso, en la Sevilla verdiblanca, da escalofríos.

Porque al Betis no se le dan nada bien sus 'bestias negras'. Al menos este año. Derrota con el Deportivo 0-3 y con el Valencia en Mestalla (23 temporadas sin ganar allí). Puede ser un acicate para este necesitado Espanyol sin Raúl Tamudo, Luis García ni Moisés Hurtado, pero al menos con el siempre genial Iván de la Pela.

El duelo entre Mané y Chaparro puede ser también interesante. Tienen dos maneras diferentes de concebir el fútbol, pero algo muy interesante en común: son dos entrenadores habituados a convivir con situaciones de riesgo. Chaparro ya ha salvado dos veces del desastre al Betis; Mané lleva meritorios ascensos (Alavés o Levante), salvaciones milagrosas (Athletic) o la final de una Copa de la UEFA (Alavés). Chaparro ha cumplido recientemente 66 increíbles años (que no aparenta para nada) y su primeros 365 días consecutivos en el banquillo bético. Renovará si le clasifica entre los nueve primeros. Pero su exigencia es superior.

El lío lo puede tener el Espanyol su pierde y se cuela en descenso. Pero el beticismo puede deprimirse a lo bestia si viera frenada una trayectoria que va en ascenso...