Derbi contra la polémica

Los Racing-Athletic ya se han consolidado como uno de los clásicos enfrentamientos en España. La historia, en la que ambos destacan por haber integrado la primera Liga de hace 80 años, la cercanía entre sus dos ciudades y la última edición de la Copa del Rey (Tchité mandó callar a San Mamés) tienen mucha culpa. Por ello, hoy habrá un ambiente especial en El Sardinero, sólo enturbiado por la polémica de los supuestos apaños que salpica al Athletic, que tiene al Racing señalado por extensión tras la confesión de Descarga y que complica hasta a Muñiz (ex entrenador del Málaga).

Para no enredar más, todos se han autoimplantado la ley del silencio y el partido vendrá de maravilla para desviar la atención. En él, Munitis será el foco de atención ya que el Athletic es su víctima favorita: es el equipo de Primera al que más goles ha metido en Liga (cuatro). El protagonismo lo compartirá con Tchité, al que los leones le motivan como una novia. El resto del once será el habitual con la única pincelada de Marcano por el sancionado Navas. Retoque que mandará a Sepsi a la izquierda. Pinillos se disputa el lateral con Valera pero, parece, que los galones desnivelarán la balanza.

Ariete de lujo. Por su parte, el Athletic se aferrará al regreso de Yeste y al olfato de Llorente, quien querrá resarcirse de su última visita a Santander: allí marcó el único gol del partido del año pasado. Eso sí, en propia puerta. El equipo de Caparrós cogió aire ante el Numancia pero su hoja de ruta esta temporada dice que pierde fuera lo que logra en casa. Tanto los vizcaínos como los cántabros están tan cerca de la calma como del riesgo. El derbi distribuirá los caminos.

Doble minuto de silencio por Suárez y Uría

Antes de que comience el partido de hoy, se guardará un minuto de silencio en memoria de Ricardo Suárez e Ignacio Uría. El primero de ellos fue jugador del club verdiblanco desde 1943 a 1949, con el que jugó 150 partidos oficiales. El defensa debutó con la elástica del Racing ante el Avilés el 26 de septiembre de 1943 y consiguió, esa temporada, el ascenso a Segunda. Luego fue traspasado por el Racing a la Real Sociedad. Suárez tenía 85 años y falleció en su pueblo natal, Elgoibar. Ayer fue su entierro. El segundo homenajeado, Uría, es el empresario guipuzcuano que fue asesinado esta misma semana a manos de la banda terrorista ETA.