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LIGA BBVA | sporting 2 - atlético 5

Aguirre opinó que el partido fue "abierto, alegre, ofensivo y de disfrute"

El entrenador del Atlético de Madrid, el mexicano Javier Aguirre, definió el encuentro como "abierto, alegre, ofensivo y de disfrute para los espectadores" aunque entendió que los seguidores del Sporting hayan salido defraudados, pero aseguró que "un equipo como el Sporting es una alegría para la Liga y sus aficionados tienen que estar orgullosos de él".

Aguirre que también tuvo elogios para sus futbolistas no dejó de reconocer que tienen "que mejorar muchas cosas en defensa y en especial en las jugadas a balón parado" como en la que los atléticos encajaron el primer gol.

El técnico indicó que habían dejado "pasar la oportunidad ante el Numancia y ante el Osasuna y no se podía dejar pasar otra" y espera poder sacar mucho provecho a esta jornada dados los enfrentamientos directos de los equipos que le preceden. "Sabíamos que jugaban primero y tercero y cuarto y quinto pero no esperábamos que pinchase el segundo", comentó.

Javier Aguirre se mostró tranquilo con respecto al partido de la Liga de Campeones. "Si por nosotros hubiera sido no viajaríamos en el día, vamos a un país civilizado no a uno que está en guerra, sólo vamos a jugar un partido", aseguró y expresó su intención de que sus aficionados puedan seguir disfrutando de partidos de esta competición a la vez que "sentando las bases para que el Atlético de Madrid esté entre los mejores de Europa todos los años y no uno de cada diez".

Por su parte, Manolo Preciado, entrenador del Sporting, también se mostró "orgulloso" de su equipo y felicitó al Atlético de Madrid aunque aseguró que "el resultado final es demasiado castigo". El técnico del conjunto gijonés también reconoció que tuvieron "un mal balance defensivo precisamente ante uno de los rivales que más daño nos pueden hacer" y manifestó que prefiere "perder así que por 0-1".

Para Preciado "cuando Barral marcó el 2-3 el Atlético de Madrid pasó por muchos apuros hasta el punto de que creí que se podía empatar y a punto estuvo de hacerlo Diego Castro con su disparo lo que pasa es que el Atlético de Madrid tiene una pegada inmensa y nos mató a la contra". El entrenador sportinguista indicó que el cambio de Gerard "fue obligado porque el jugador empezó a sentir mareos" y se despidió diciendo que "este es un partido ya pasado y ahora lo que hay que hacer es pensar en el Atlhétic de Bilbao" ante el que el Sporting juega el próximo domingo.