Manninger, Malafeev y los palos aplacan un zafarrancho ofensivo

Del Piero pidió jugar a Ranieri mientras Arshavin, que no volverá a hacerlo ante su grada, fue el único sustituido en el Zenit. Dos detalles tan mínimos como significativos en un partido sin lugar a la especulación. La Juve se vio abocada a un zafarrancho ofensivo propuesto por un Zenit suicida que convirtió el partido en una ruleta rusa aplacada por los porteros (Malafeev y Manninger) y los palos, ante las acometidas de Mellberg, Iaquinta y Pobrebnyak.

Especialmente feliz fue la actuación de Manninger, que sigue haciendo méritos para quedarse en propiedad la portería de Buffon si el City afloja 75 millones por Gigi. Fue un tiroteo, un duelo de ida y vuelta con un mediocampo descosido y unas defensas desbordadas por los costados. Danny sacaba conejos de la chistera, Del Piero inventaba en una baldosa helada, Denisov aparecía por sorpresa, Iaquinta revoloteaba en el área... Pero todo murió en manos de los guardametas. Manninger le echó una mano al Real Madrid. Y en lugar de pasteleo se produjo empacho, aunque el marcador delate ayuno.

Manninger: "Estoy muy feliz por mi partido"

"Teníamos miedo al césped porque estaba helado, pero hemos sabido mantener la posición. Estoy muy feliz con mi labor en el partido. He acertado en varias oportunidades y he podido dar al equipo la posibilidad de sumar un empate. He demostrado que la Juventus han acertado al apostar por mi fichaje y por eso me voy satisfecho. La pena es que no hayamos podido convertir alguna de las ocasiones que hemos tenido porque nos habrían dado la victoria. Espero que Buffon se recupere y pueda estar pronto con nosotros".