Un gol del español Jose Sarriegi en el tramo final del encuentro, propició la inesperada victoria del Panathinaikos en Milan ante el Inter que, sin embargo, logró su clasificación matemática para los octavos de final impulsado por el marcador del otro encuentro del grupo.

El Werder Bremen neutralizó la ventaja de dos goles que adquirió el Anorthosis en Chipre y situó al conjunto de Jose Mourinho en la siguiente eliminatoria a falta de una jornada, la del 9 de diciembre, en la que acudirá a Alemania para procurar hacerse con el primer puesto del cuarteto.

La carencia de ideas y la falta de definición del campeón transalpino estimuló el ánimo del conjunto griego, necesitado de puntos para mantener vivas sus opciones. Luis Figo, Adriano y Zlatan Ibrahimovic protagonizaron varias aproximaciones al área de Mario Galinovic. Pero sin claridad y sin convicción.

En la segunda parte, la decisión local decayó. El Panathinaikos logró sumir a su adversario en el ritmo de juego que le interesaba. De esta forma, la amenaza visitante fue real. Simão y Giannis Goumas advirtieron al meta Julio César, pero fue el zaguero español, criado en la cantera de Lezama, Jose Sarriegi, el que batió al portero del Inter en la única ocasión clara de los visitantes.

La reacción del cuadro de Mourinho fue fulgurante pero desordenada. Sin la claridad suficiente para dar un giro al partido, tras el cual, fue sellada la clasificación.