El Arsenal sella su billete y finiquita las esperanzas del Dinamo

Arreglados u olvidados los problemas que han molestado al Arsenal en una semana llena de confusión y turbulencias para este club, en la defensa, el entrenador francés galo volvió a contar de nuevo con el ya ex capitán "gunner", el malogrado William Gallas, en una plantilla que incluyó también otras opciones poco comunes, como Aaron Ramsey, ante las bajas en el medio centro de Samir Nasri y Abou Diaby.

La ausencia de Emmanuel Adebayor en el ataque dio, también, una ocasión de oro al jovencísimo atacante mexicano Víctor Vela, de tan sólo 19 años. Una circunstancia que jugó en detrimento de Nicklas Bendtner, que comenzó en el banquillo. El brazalete sentó bien a Cesc. El medio español hizo lo que mejor sabe hacer. Distribuir balones desde el centro al holandés Robin Van Persie, quien gozó de un buen momento a los 35 minutos de partido; y al joven Vela, que jugó bien sus cartas, presionando a los defensas del Kiev.

En favor del once ucraniano se puede decir que los pupilos del ruso Yuri Siomin se mantuvieron firmes en la defensa. En el minuto 28, Vela se adueñó de un balón en el área ucraniana. Una ocasión inmejorable para haber impactado a su entrenador, al toparse con un momento de caos en el área con tres defensas ucranianos totalmente despistados. Aaron Ramsey trató de buscar frutos al barullo del Dinamo con una peligrosa internada que concluyó con un balón desviado por el larguero.

Cesc trató de burlar al meta del Dinamo con un disparo corto que apenas planteó dificultad al cancerbero. Un minuto después, Gallas cometía un error imperdonable al regalar la pelota al delantero guineano Bangoura, que automáticamente disparó contra los dominios del español Manuel Almunia. En la segunda mitad, la presión azuzó al Kiev. El conjunto visitante era consciente de la necesidad de marcara para no quedar fuera de la competición. El Dinamo se convertía en dominador por momentos; se hacía con la posesión de la bola y de la mano de Mileskiev, Bangoura y Aliev creaba momentos de fuerte presión para el meta de Arsenal.

Pero los 'cañoneros' se ponían las pilas y el ritmo aumentaba notablemente en el segundo acto. De repente, las ocasiones se sucedían en ambos frentes. No eran sólo los hombres de Siomin los que iban a la desesperada. Ahí estaba Van Persie, y Cesc, y el joven Vela aportando su granito de arena. En el minuto 75, Wenger reemplazó a Vela por Jack Wilshere, de 17 años, el debutante más joven en una competición europea. La actuación de Almunia en la portería del Arsenal resultó vital en el minuto 78. El meta español paró un disparo corto a Milevskiy que podría haber salvado al Kiev en una recta final que dejó un duelo abierto.

Acto seguido, Wilshere filtró una bola a Van Persie que éste dejó en bandeja al suplente Bendtner, incapaz de rematar. Pudo ocurrir de todo, pero fue finalmente el suplente Nicklas Bendtner el encargado de sellar, con el único gol del partido -el primero que anota desde el pasado 23 de septiembre-, en la recta final (minuto 87) el pase a octavos del once de Wenger. Lo hizo al rematar con certeza un lanzamiento de falta que asumió Cesc. El drama para el Dinamo aumentó con la expulsión, por doble amarilla de Aliev en los últimos minutos.