El Valencia se aferra a la cabeza de la Liga

El Valencia, con dos goles de David Villa, uno de Juan Mata y otro de Vicente Rodríguez, se aferró a la cabeza de la Liga tras lograr una cómoda victoria ante el Numancia, en un partido en el que el equipo local fue capaz de reaccionar a tiempo y golear a un rival que creó muy poco peligro.

No fue un encuentro brillante y aunque el Valencia se mostró espeso en varios momentos del partido, el conjunto visitante no supo aprovechar esa falta de inspiración y el choque concluyó con un triunfo holgado y merecido del equipo de Unai Emery que, sobre todo tras el 2-0, mostró una superioridad total.

El partido estuvo condicionado por el gol logrado por Villa a los tres minutos de juego, que obligó al conjunto soriano a abrir sus líneas, a tratar de tener el balón y buscar la meta rival, al tiempo que permitió que el conjunto local tuviera espacios para aproximarse a la portería de Juan Pablo.

Por ello, el Numancia mantuvo la posesión del balón durante alguna fase del primer periodo del partido, pero las aproximaciones más peligrosas fueron siempre del Valencia, que puso en apuros muchas veces a la meta rival, aunque sus jugadores pecaron de insistir en los disparos lejanos.

Sin desplegar un gran fútbol, la búsqueda del gol por parte de los atacantes del Valencia pudo haber llevado el partido al descanso con algún gol más en la cuenta del equipo valenciano, en especial si no se hubiera sancionado con fuera de juego un remate a gol de Villa que, quizá, estaba en posición correcta.

El Numancia no dio la sensación de estar cerca del empate, pues Brit, su único delantero, estuvo muy desasistido. Una falta lejana rechazada por el brasileño Renan en el último instante del primer periodo fue su mejor opción, aunque en las primeras acciones del segundo periodo llegó con más claridad a la meta local que en toda la primera mitad.

En este comienzo de la segunda parte, el partido era de ida y vuelta, con mucho balón dividido y con un Valencia que no estaba fino, hasta el punto de malograr varias jugadas seguidas de ataque y contragolpe mucho antes de llegar a las inmediaciones de la meta de Juan Pablo.

Los constantes fueras de juego, los errores en los últimos pases, los caracoleos excesivos de algunos jugadores y la falta de profundidad del Valencia mantenían al Numancia con esperanza de tener una oportunidad y empatar el encuentro, aunque sus llegadas eran esporádicas.

Fue necesario un malentendido en defensa entre Juanra y Mario para que un pase de Villa permitiera que Mata batiera por bajo a Juan Pablo en una de las ocasiones menos claras de su equipo y dejara prácticamente sentenciado el encuentro.

Tras ese gol, el Numancia bajó los brazos, el Valencia jugó sin presión y logró un tercer tanto por medio de Vicente, que reflejó las diferencias reales que hubo sobre el terreno de juego entre el Valencia y el Numancia, ante de que Villa, con el partido casi concluida cerrara la goleada con 4-0.

En suma, el Valencia consiguió un buen marcador en un partido en el que enfrente apenas encontró oposición y en el que no perdió nunca la confianza de lograr un resultado abultado.